Papas Conciliares – II
Estos “Comentarios” siempre retornan al problema del subjetivismo porque mantienen que la Iglesia y el mundo de hoy no pueden ser correctamente entendidos sin él. Subjetivismo significa esa pudrición de la mente por la cual la persona, o sujeto, ha permitido que su mente sea desconectada de la realidad, o del objeto, dejando a la persona en libertad para rehacer la realidad de acuerdo a su propia fantasía. De allí el mundo de fantasía y toda su locura rodeándonos hoy en día, y la fantasía de la neo-Iglesia (Iglesia y mundo son reconciliables) y la misma fantasía de la neo-Fraternidad (Tradición y neo-Iglesia son reconciliables).
Para uno mantener su agarre mental en la realidad y su equilibrio en la Fe, es esencial no dejar de distinguir lo subjetivo de lo objetivo. Por ejemplo, los Papas Conciliares están gravemente equivocados en la Fe, objetivamente hablando, pero subjetivamente hablando han sido convencidos de que estaban en lo correcto, y han bien podido estar al menos parcialmente (Dios lo sabe) bien intencionados. Pero si no logro distinguir lo objetivo de lo subjetivo entonces puedo fácilmente caer en uno de dos errores familiares. O bien sé que ellos están objetivamente equivocados así que deben estar subjetivamente equivocados, por consiguiente no pudieron estar bien intencionados y debieron saber lo que estaban haciendo, así que no pudieron haber sido Papas, y así yo caigo en el sedevacantismo dogmático. O bien observo que están convencidos y son convincentes, así que están subjetivamente en lo correcto y por consiguiente deben estarlo objetivamente, así que debo seguirlos, y caigo en el liberalismo (aquí está como Benedicto XVI y Mons. Fellay, por ejemplo, han – objetivamente – engañado a muchos buenos Católicos, sean lo que fueren sus intenciones de ellos).
Por el contrario, si tengo una fe clara y sé distinguir entre realidad objetiva y fantasía universal de hoy, entonces, midiendo al fin Roma por la Fe y no la Fe por Roma, puedo ver que los Papas Conciliares han podido estar convencidos y tener al menos en parte – Dios lo sabe – buenas intenciones, pero nunca los seguiré cuando sea me alejan de la verdadera Fe y de la verdadera Iglesia. Por otro lado, yo no excluiré la posibilidad de una medida de buenas intenciones por parte de ellos, ni tampoco yo tomaré como propio el juzgar esa medida, sino que yo esperaré a que la Iglesia juzgue, luego de una audiencia, sobre su pertinacia y herejía.
Pero los hombres de Iglesia de hoy están tan universalmente infectados con la fantasía de la libertad, igualdad y los derechos del hombre en oposición al deber, la jerarquía y los derechos de Dios, que las probabilidades que tal audiencia tenga lugar en cualquier tiempo cercano son ciertamente tenues. Por consiguiente en mi propia mente yo tengo talvez que dejar en suspenso la cuestión de estos Papas. Tal suspenso no es confortable, pero sé que Dios en su propio buen tiempo vendrá al rescate de Su Papado.
Mientras tanto la estructura de Su Iglesia por medio de la cual toda autoridad deriva del Papa para abajo, no ha cambiado. Por consiguiente, dado que el Papa Francisco está condenando a la Tradición en cuanta oportunidad se le presenta, la Tradición no puede hacer otra cosa que luchar para sobrevivir. En cuanto a la fundación y subsecuente liderazgo de la Fraternidad San Pío X por Monseñor Lefebvre, la aprobación oficial de los Estatutos de ella por el obispo diocesano local fue de inmensa importancia. Eso hizo de la FSPX la luz de emergencia con referencia a la Iglesia oficial, y el movimiento de la “Resistencia”, tratando de reparar esa luz de emergencia, se refiere tambien a la Iglesia oficial. Este intento, ¿está obstaculizado por ambos electricistas, los de la corriente oficial como los de la emergencia? Pues, que así sea. Pero hay que mantener al menos unas pocas luces prendidas en la Iglesia. Sin embargo, contra tal obstaculización por parte de los compañeros electricistas, que nadie espere de la “Resistencia” prodigios o maravillas. Paciencia. Dios tiene todo bajo control.
Kyrie eleison.
N.B. Si Dios quiere, Confirmaré yo este verano: (en Francia) cerca de Pau el 7 de Junio, cerca de Vichy el 14 de Junio; (en Canadá) Calgary el 29 de Junio; y (en los Estados Unidos) Denver el 1º de Julio, Nashville el 2 de Julio, Jacksonville el 5 de Julio.