Dios Recluta

Dios Recluta on abril 29, 2017

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Sobre problemas candentes de hoy el Padre Jean-Michel Gleize, Profesor de Teología en el Seminario en Ecône de la Fraternidad San Pío X, ha escrito dos artículos que vierten interesante luz sobre sus soluciones. En primer lugar, ¿puede el Papa caer en herejía formal? Respuesta, puede ser, porque no siempre a los Papas se les ha mantenido como estando tan libres de error como ellos lo han sido en los últimos pocos siglos. Y, en segundo lugar, ¿muestra el documento Papal Amoris Laetitia que el Papa Francisco ha caído en herejía formal? Respuesta, estrictamente hablando, no, pero en efecto uno puede decir eso porque el neo-modernismo socava a la doctrina mientras que pretende mantenerla. Esta segunda pregunta tendrá que esperar a otro número de estos “Comentarios” pero si el Padre Gleize no quería estar atrapado entre el sedevacantismo y el liberalismo, él tenía que abordar primero la primer pregunta.

En el primer y más corto artículo, él dice que desde la “Reformación” Protestante en adelante, los teólogos Católicos en general, notablemente San Roberto Bellarmino, han mantenido que el Papa no puede caer en negación consciente y pertinaz de un dogma de la Iglesia, es decir en herejía formal. Ellos citan a Nuestro Señor diciéndole a Pedro que confirme a sus hermanos en la Fe (Luc.XXII,32) lo cual presupone que Pedro no puede perderla. Y ellos argumentan que nunca en la historia de la Iglesia un Papa ha caído en herejía formal. Por otro lado, previo a la revolución Protestante, dice el Padre Gleize, los teólogos Católicos desde el siglo 12do hast el 16to generalmente juzgaron que un Papa puede caer en herejía formal, y esta opinión ha continuado en los tiempos modernos, aunque menos comúnmente.

El Padre Gleize concluye que especialmente en vista de los Papas Conciliares, los últimos teólogos mencionados no han probado su tesis. En cuanto a Pedro estando siempre protegido de herejía formal por Nuestro Señor, la fe es un acto de la mente empujado por el libre albedrío, y Dios raramente interfiere con el libre albedrío. Y en cuanto a los Papas en la historia, Honorio por ejemplo fue anatematizado por sus sucesores por haber favorecido la herejía Monotelita. Esta conclusión es seguro disputable y disputada, pero si uno mira a la cuestión desde el punto de vista histórico de las Siete Edades de la Iglesia, ella sí tiene sentido.

Por tres Edades (Apóstoles 33–70, Mártires 70–312, y Doctores 312 a cerca de 500 DC) la Iglesia escaló a la Cuarta Edad, el triunfo de 1,000 años del Cristianismo (cerca 500–1517). Pero por los finales de la Edad Media, el Diablo y el pecado original estaban comiendo en el Cristianismo y los hombres se lanzaron a la Quinta Edad de la Apostasía (1517-?), en la cual Cristianos degenerándose inventaron una forma de hipocresía tras otra (Protestantismo, Liberalismo, Comunismo entre otras) para rendir homenaje a la virtud y civilización Cristianas aún mientras se “liberaban” a sí mismos per gozar del último vicio, por ejemplo ahora “casamiento” del mismo sexo. Ahora, Dios habría podido hacer que la Edad Media continúe para siempre, pero Él hubiera tenido que interferir con el libre albedrío. Como fue, Él dio a Su Iglesia un cultivo especial de Santos para liderar la Contra-Reformación y durante el siguiente medio-milenio, Él obtuvo para variar la población de Su Cielo, una cosecha de Santos post-medievales. Pero para contrarrestar la corrupción del hombre post-medieval, Dios eligió reinforzar la autoridad de Su Iglesia de manera que las almas deseando la salvación pero ello ya no más suficiente por virtud interna, pudieran al menos ser dirigidas hacia el Cielo por autoridad externa. Luego por supuesto el Diablo se puso a trabajar especialmente en los hombres de Iglesia en altas posiciones de autoridad y luego de casi medio milenio es como si Nuestro Señor dijo, “Si ustedes no quieren Mi Iglesia, entonces tengan su propia Neo-Iglesia”, y eso fue el Vaticano II.

Entonces ahora, la autoridad en la Iglesia está dañada más allá de toda reparación humana y Dios usará algunos otros medios para exprimir a partir de nuestro mundo espiritualmente exhausto, aún otra cosecha de almas. Un Castigo asegurará la brillantez inicial de la Iglesia de la Sexta Edad pero el Diablo y el pecado original tendrán una naturaleza humana sobre la cual trabajar que está debilitada en profundidad por el liberalismo de la Quinta Edad, así que no va a tomar mucho tiempo para traer la Séptima Edad del Anticristo. Pero será una Edad de algunos de los más grandes Católicos de toda la historia de la Iglesia – un cultivo de especialmente grandes Santos.

Kyrie eleison.