Perfecciones de Dios

Presencia, Poder

Presencia, Poder on octubre 12, 2019

Mientras la “civilización occidental” se desmorona cada vez más rápido alrededor nuestro, es muy necesario recordar que “Nuestra ayuda está en el nombre del Señor”, y en la intercesión de su Madre, y en nada más que eso. Pero pocas personas, incluso los católicos, se dan cuenta de cuán cerca de nosotros y cuán poderoso es Dios Todopoderoso. Si se dieran cuenta, podrían volverse más fácilmente a la oración, que es, de hecho, el único obstáculo serio hoy en día que impida el avance del mal. Por un castigo justo por la apostasía de la humanidad, Dios ha dejado caer bajo el control de sus enemigos cualquier otro medio de influencia y poder.

Pero, ¿quién es Dios? “Padre Todopoderoso, creador del cielo y de la tierra, de todas las cosas visibles e invisibles.”

En primer lugar, Padre. “Creador del cielo y de la tierra”, pero no sólo un fabricante que fabrica un producto y luego lo deja para que haga su propio camino en el mundo. La mejor comparación para ilustrar el cuidado de Dios y Su amor por las criaturas que Él crea es con el amor de un padre humano por sus hijos que se extenderá normalmente hasta su muerte de él o de ellos, y más allá. Pero el amor de un padre humano es finito, el amor de Dios es infinito.

Segundo, Todopoderoso. Tal vez la manera más sencilla de captar el poder o la fuerza de Dios es aceptar la enseñanza de la Iglesia de que Dios es el Creador, y que todo ser que existe es una criatura que Dios creó, y que la creación es de la nada. Cada vez que los seres humanos “creamos” algo, siempre es de algún material preexistente, por ejemplo, una silla de madera, una casa de ladrillos, los ladrillos de arena, etcétera. Cuanto más lo pienso, más difícil es imaginar algo creado de la nada, por la buena razón de que todos los cambios que conozco a mi alrededor están hechos de algo. Si pudiera captar algo que sale de la nada, empezaría a ver el significado de “Todopoderoso”.

En tercer lugar, creador de todas las cosas. De todas las cosas materiales o “visibles ”, hasta el final de la galaxia más lejana, San Ignacio de Loyola solía quedarse fuera de su habitación en Roma y sólo miraba las estrellas por la noche para disfrutar de la demostración del poder infinito de Dios. Y mucho más, creador de todas las cosas espirituales o “invisibles ”, como el alma que da vida y las facultades de razón y libre albedrío a cada ser humano vivo, por no hablar de las nueve Órdenes inmateriales de los ángeles. ¿Dudan de que existan, porque son inmateriales? ¿Todavía dudan de que hay algo más que la pura inteligencia humana que ordena el mal a nuestro alrededor hoy en día?

Pero mientras que muchas personas pueden estar dispuestas a admitir que nada podría venir a la existencia sin un Creador, lo que pocas personas entienden es que la acción creadora de Dios continúa en cada momento en que lo existente continúa existiendo, de modo que si Dios por un momento dejara de mantener en existencia algo existente, instantáneamente caería de nuevo en la nada de la cual salió. Una comparación puede ayudar. Para poner en marcha un tren eléctrico, el conductor debe tirar hacia él de lo que se llama el “interruptor del hombre muerto”, pero debe seguir tirando hacia él para que el tren siga moviéndose, porque el interruptor o la palanca está cargada por resorte, de modo que si se suelta, la palanca saltará automáticamente hacia atrás y el tren se detendrá. De este modo, el tren queda protegido de la aceleración incontrolada si el conductor, por ejemplo, muere en el momento del cambio. Así, el tren arranca tirando primero de la palanca, pero debe seguir tirando de la misma palanca para que el tren siga circulando.

De la misma manera Dios crea una criatura en su primer momento, pero volvería a caer en la nada si no mantuviera esa acción creadora, o “conservara” a la criatura durante la existencia de la cosa. En otras palabras, así como el primer tirón de la palanca pone en marcha el tren, pero la misma palanca debe seguir siendo tirada para que el tren funcione, así la única diferencia entre la creación de una criatura por parte de Dios y su conservación es la diferencia entre el primer momento de su existencia y cada momento posterior. Así, en cada momento que existo, Dios está activo dentro de mí, creando-conservando tanto mi alma como mi cuerpo. Así Él está más presente para mí que yo para mí mismo, haciendo lo que sólo Dios puede hacer, es decir, tenerme fuera de la nada. ¿Y yo dudo que sea poderoso? ¿O dudo que esté cerca de mí? ¿O dudo que se preocupe por mí?

Kyrie eleison.

Las Flores Hablan

Las Flores Hablan on junio 2, 2012

Dios es Ser infinito, Verdad infinita, Bondad infinita, infinitamente justo e infinitamente misericordioso. Así enseña su Iglesia y la idea es grandiosa y hermosa, así no tengo objeción. Pero entonces aprendo que su Iglesia también enseña que por un pecado mortal solo, el alma puede ser condenada para toda la eternidad a rigurosos y crueles sufrimientos mas allá de toda imaginación, y eso no es tan agradable. Comienzo a objetar.

Por ejemplo, nunca fui consultado antes que mis padres decidieran traerme a la existencia ni fui consultado sobre los términos del contrato, por así decirlo, de mi existencia. Si hubiera sido consultado, bien hubiera podido objetar tan extrema alternativa entre inimaginable gloria e inimaginable tormento tal como lo enseña la Iglesia, ambos sin fin. Habría podido aceptar un “contrato” más moderado por el cual a cambio de un Cielo acortado hubiera enfrentado el riesgo de solamente un abreviado Infierno, pero no fui consultado. Una perpetuidad de ambos me parece estar fuera de toda proporción con respecto a esta breve vida mía en la tierra: 10, 20, 50, aún 90 años, hoy están aquí, mañana idos. Toda carne es como hierba verde –”que a la mañana está en flor y crece, y a la tarde es cortada y se seca” (Sal.LXXXIX,6). Si sigo esta línea de pensamiento, Dios me parece tan injusto que seriamente me pregunto si en verdad existe.

El problema nos obliga a reflexionar. Supongamos que Dios en verdad sí existe, que El es tan justo como su Iglesia dice que El lo es, que es injusto imponer sobre cualquiera una pesada carga sin el consentimiento de esa persona, que esta vida es breve, una mera bocanada de humo comparada con lo que la eternidad debe ser, que nadie puede en justicia ser punible de un terrible castigo si él no estaba consciente de estar cometiendo un terrible crimen. Entonces, ¿cómo puede ser justo el supuesto Dios? Si El es justo, entonces lógicamente cada alma que alcanza la edad de razonar debe vivir lo suficiente al menos como para conocer la elección para la eternidad que ella está haciendo, y la importancia de tal elección. Sin embargo ¿cómo es eso posible, por ejemplo en el mundo de hoy, donde Dios está tan universalmente abandonado y desconocido en la vida de los individuos, las familias y los Estados?

La respuesta sólo puede ser que Dios viene antes que individuos, familias y Estados, y que El “habla” dentro de cada alma previamente a todos los seres humanos e independientemente de ellos, de manera que aún un alma cuya educación religiosa ha sido nula y sin valor, está consciente que está haciendo una elección cada día de su vida, que ella sola está haciendo esa elección para sí misma y que esa elección tiene consecuencias enormes. Pero nuevamente ¿cómo es eso posible dada la impiedad de un mundo que nos rodea por todos lados, tal como es el nuestro de hoy día?

Porque el “habla” de Dios a las almas es mucho más profundo, mas constante, mas presente y más atrayente de lo que puede ser el habla de cualquier ser o seres humanos. El solo creó nuestra alma. El continuará creándola durante cada momento de su existencia sin fin. Por consiguiente El está a cada momento más cercano a ella de lo que puedan estar incluso sus padres que simplemente compusieron su cuerpo – a partir de elementos materiales mantenidos en existencia por Dios solo.

Y la bondad de Dios está igualmente detrás y dentro y debajo de cada buena cosa que el alma disfrutará alguna vez en esta vida, y el alma está profundamente consciente que todas estas buenas cosas son meros derivados de la infinita bondad de Dios. “Calla,” le dijo San Ignacio de Loyola a una diminuta flor, “Sé de quién estás hablando.” La sonrisa de un pequeño niño, el diario esplendor de la naturaleza durante todos los tiempos del día, la música, las nubes que presentan siempre una obra maestra de pintura, y otras creaturas sin fin – aún amadas con un profundo amor, estas cosas le dicen al alma que hay algo mucho más o – Alguien.

“En Ti, Yahvé, me refugio; no quede yo nunca confundido” (Sal.XXX,2)

Kyrie eleison.

Mas Alegre

Mas Alegre on enero 28, 2012

Su Excelencia, ¡Por favor díganos algo más alegre!

Dios existe. El es todopoderoso, omnisciente, perfectamente justo, aunque su misericordia tambien es sin límite. El controla perfectamente todo lo que sucede en el mundo. Ni el Diablo ni sus servidores humanos, incluyendo a los criminales que hoy en día conducen el mundo, pueden levantar el dedo meñique sin su permiso. El conoce cada detalle de sus planes diabólicos y El utiliza a cada uno de ellos para cumplir con su propio designio Providencial.

Pero ¿Cómo puede entonces El permitir tanto mal en nuestro mundo?

Porque si bien El nunca quiere el mal, El quiere permitirlo de manera que un bien mayor se saque de ese mal. Numerosas profecías indican que de la corrupción global de hoy día, saldrá mañana el triunfo mas grande jamás alcanzado por la Iglesia Católica, como lo ha dicho Nuestra Señora de Fátima: “Al final mi Corazón Inmaculado triunfará.” Lo que está sucediendo en este momento preciso es que Nuestro Señor está utilizando a sus enemigos para purificar su Iglesia.

Pero ¿No podía haber encontrado una manera menos desagradable de purificar su Iglesia que la de hacernos atravesar por la increíble corrupción de hoy día?

Si ello dependiera únicamente de El, sin ninguna duda hubiera podido encontrar otras maneras de purificar su Iglesia, pero si usted y yo supiéramos todo lo que El sabe – pensamiento tonto – y si, sobre todo, usted y yo quisiéramos, como El lo hace, respetar la libre elección que El da a todos los seres humanos, entonces es muy verosímil que usted y yo viéramos que la manera que El elige de hacer las cosas es la mejor.

Y, por favor ¿que tiene que ver la libre elección del hombre con esta cuestión?

Dios no quiere robots o simplemente animales irracionales para compartir con El su beatitud. Ahora bien, aún El no puede dar a sus criaturas una felicidad merecida que ellas no hubieran hecho nada por merecer, puesto que eso es contradictorio y si bien tiene poder sobre todo lo que es, sin embargo no tiene poder sobre lo que no es, como es el caso de las cosas contradictorias. Pero si sus criaturas deben, al menos en parte, merecer su felicidad, entonces El debe darles libre elección, la cual si es verdaderamente real, debe ser capaz de elegir lo opuesto de lo que Dios quiere para esa criatura, y si ella es realmente capaz de elegir el mal, entonces eso es lo que sucederá, más o menos a menudo.

Pero usted dice que la verdadera Iglesia sigue a Nuestro Señor cuando ella enseña hasta que punto el camino que lleva al Cielo es estrecho y pocos los que lo encuentran (Mt.VII,14). ¿Cómo puede valer la pena para Dios el haber creado, hoy día mismo por ejemplo, una masa de seres humanos si solamente un número relativamente reducido alcanza el Cielo?¿Cómo es posible que un número tan grande cayendo en los horrores del Infierno no sea un precio demasiado elevado que paga Dios por el pequeño número de los que llegan al Cielo?

Porque Dios obra según la calidad, y no según la cantidad. Que sólo diez hombres justos hubieran podido salvar a toda la ciudad de Sodoma (Gen.XVIII,32) prueba cuán preciada es a Dios una sola alma que responde a su amor, mucho mas que un gran número que por su propia libre elección rechazan su amor. “Yo hubiera sufrido toda la Pasión solo por ti” dijo una vez Nuestro Señor a un alma. El diría lo mismo a toda alma.

¿Quiere usted decir que si, aún cuando el mundo me hace sufrir y me atormenta, simplemente me adhiero tanto mas estrechamente a Dios, entonces El tiene eso en cuenta a mi favor y para los que me rodean? ¡Yo casi quisiera que el mundo fuera aún peor!

¡Ahora usted comienza a comprender!

Kyrie eleison.