Society of St. Pius X

LEY DEFINIDA

LEY DEFINIDA on agosto 3, 2024

Y si no veo esa monstruosidad, debo rezar,

El Rosario, ¡quince misterios diarios, sin dudar!

Los intentos desesperados del papa Francisco de utilizar toda su autoridad papal para aplastar el rito tridentino de la misa y eliminarlo de la Iglesia Católica de una vez por todas, están ganando, con razón, siempre menos tracción entre los católicos. ¿Cómo Dios Todopoderoso puede haber permitido que Su propia autoridad que confía a Su Vicario en la tierra sea tan mal utilizada, sigue siendo un misterio, porque por supuesto Él la pone en manos de los hombres para construir su Iglesia y no para derribarla. Muchos católicos están tan angustiados por el problema que están recurriendo a la simple solución del sedevacantismo, porque con esa teoría de que no ha habido ningún papa válido desde Juan XXIII (1958–1963), los seis papas desde el Vaticano II (1962–1965) no han sido papas en absoluto. Pero esa teoría, que parece resolver con tanta facilidad el problema de los papas conciliares, adopta muchas formas contradictorias, y puede llevar a los católicos a abandonar la fe por completo, sobre la base de que no puede quedar ningún sacerdocio válido, así que mejor se quedan en casa en vez de ir a misa. Así, el sedevacantismo puede plantear más problemas de los que parece resolver.

Tales frutos sugieren que el sedevacantismo bien puede no ser la solución correcta al grave problema establecido por todos los seis papas conciliares, uno tras otro, y culminando en los horrores especiales del papa Francisco. Puede ser un buen momento para recordar la fecunda solución de Mons. Lefebvre (1905–1991), destacado pionero en su oposición hoy al modernismo del Vaticano II con su “Tradicionalismo”.

Tradición es catolicismo, decía, y catolicismo es Tradición. «Jesús es el mismo, ayer, hoy y por los siglos de los siglos» (Heb. XIII, 8). Siglos de protestantismo y liberalismo han creado un mundo moderno que es tan glamuroso y seductor que al final hasta los vicarios de Cristo en la tierra se han dejado convencer de que Jesús tiene que adaptarse al hombre moderno, y no al revés. Pero Jesús y su Iglesia no necesitan modernizarse, sino ser presentados como la Tradición católica siempre lo hizo en los tiempos pasados. Y el asombroso éxito de la Fraternidad San Pío X de Monseñor en todo el mundo, al menos hasta su muerte en 1991, demostró que la versión tradicional de Jesús y su Iglesia aún puede prosperar, contra la modernidad.

¿Qué dijo entonces el arzobispo sobre la autoridad católica modernista? Dijo que incluso los papas católicos siguen siendo por sí mismos hombres falibles, a menos que comprometan su autoridad infalible, lo que sólo pueden hacer en las cuatro estrictas condiciones claramente establecidas en la solemne Definición del infalibilidad de 1870. Si falta una sola de las cuatro condiciones -y los papas conciliares nunca presentaron las cuatro en su promoción de las novedades conciliares – entonces los papas son tan capaces como cualquier ser humano normal de cometer errores. Por eso las novedades modernistas del Vaticano II de ninguna manera caen bajo la protección de la infalibilidad papal, altamente restringida en su aplicación práctica.

Pero, ¿qué pasa con las órdenes papales del papa de abandonar el rito tradicional de la misa en latín? ¿No estamos obligados a obedecerles? No, no estamos obligados a obedecerles porque no son ordenes legales, como monseñor Lefebvre siempre dijo, y como la Iglesia Católica siempre ha dicho. El Papa no tiene poder de Dios para ordenar cualquier cosa que se le ocurra. La definición de ley es que es un mandato de la razón para el bien común, hecho por aquellos que son responsables del bien común. Así que si no es para el bien común, como cualquier ley que pretenda legalizar el aborto, entonces no es ley en absoluto.

Por lo tanto, cuando se trata del sacrificio de la misa, del que el padre Pío dijo que nuestro planeta tierra puede antes estar sin la luz del sol que sin ese sacrificio, sustituir su más venerable y digno rito en latín, centrado en Dios, por un nuevo rito en lenguas modernas, doctrinalmente dudoso, sin dignidad, inventado para centrarse en el hombre, se opone tan claramente al verdadero bien común de la Iglesia católica que no puede ser objeto de una verdadera ley de la Iglesia. Por lo tanto, ninguna pretendida ley tal se debe obedecer, por muchas veces que el papa Pablo VI, o el papa Francisco, o sus sucesores de ellos, traten de imponer tal monstruosidad.

Kyrie eleison.

Arzobispo Transferido

Arzobispo Transferido on septiembre 26, 2020

Hace dos días, los restos mortales de Mons. Lefebvre fueron trasladados de la bóveda junta al Seminario de Écône donde habían descansado temporalmente desde su muerte en 1991, a un espléndido sarcófago en la cripta debajo de la Capilla del Seminario especialmente preparado para su reposo permanente. Todo el esplendor es apropiado para el lugar de sepultura del más grande hombre de Dios, el más grande héroe de la Fe Católica, de los tiempos modernos, el Arzobispo que prácticamente por sí solo salvó la doctrina católica, los sacramentos y el sacerdocio de su corrupción y eliminación por parte de hombres modernos que ya no creían en ellos, por lo menos así como habían sido transmitidos por la fiel Iglesia Católica a lo largo de casi dos mil años.

Y se puede decir que después de su muerte sus sucesores continuaron su trabajo más o menos fielmente por otros 20 años, pero luego en 2012 se produjo un cambio en su Fraternidad San Pío X que obligó a muchas almas a hablar de una Neo-fraternidad, algo así como los cambios en la Iglesia después del Concilio Vaticano II (1962–1965) obligaron a muchos católicos a hablar de una Neo-iglesia, tan radicales fueron los cambios. Desgraciadamente, la ceremonia de traslado de los restos del Arzobispo reflejó este traslado de su obra de la Fraternidad a la Neo-fraternidad, porque no fue celebrada por el actual Superior General, el P. David Pagliarani, sino por su predecesor como Superior General, el principal responsable del traslado de la Fraternidad a la Neo-Fraternidad. Esta elección del predecesor del P. Pagliarani para celebrar un acontecimiento tan destacado en honor del Fundador de la Fraternidad no es ni un buen augurio ni un accidente. Nos recuerda la cita de Nuestro Señor (Mt. XXIII):

29 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque edificáis las tumbas de los profetas y adornáis los monumentos de los justos, 30 diciendo: “Si hubiéramos vivido en los días de nuestros padres, no habríamos participado con ellos en el derramamiento de la sangre de los profetas “.

Puede ser que hoy en día la hipocresía universal de todo un mundo que rechaza a Nuestro Señor sea tan profunda que muchas de las almas que participaron en la ceremonia de hace dos días no eran hipócritas conscientes, Dios lo sabe, ni tan severos para ser condenados como Nuestro Señor condenó a aquellos que Él sabía que estaban a punto de crucificarlo. Porque, en efecto, los líderes de la Fratenidad del Arzobispo fueron hábiles en engañar a los católicos que fielmente seguían al Arzobispo en su “desobediencia” a los líderes normales de la Iglesia. Estos, de hecho, los habían estado llevando de la religión católica de Dios a la religión conciliar del hombre. Sin embargo, objetivamente hablando, el paralelo es claro.

* Los fariseos construyeron monumentos en honor a los profetas que ellos mismos también habrían matado. La Neo-Fraternidad construye un sarcófago para su Fundador cuando ella misma se hace amiga de los pachamamistas a los que ya abominaba.

* A los fariseos Nuestro Señor prometió enviar mensajeros para denunciar su infidelidad, pero a éstos los matarían igualmente. A la Neo-iglesia y a la Neo-fraternidad envía a un arzobispo Viganò para recordarles su infidelidad. La Neo-iglesia lo mataría. La Neo-fraternidad hace todo lo posible por no prestarle atención.

* Los fariseos fueron advertidos por Nuestro Señor de las graves consecuencias de su infidelidad, y de hecho en el año 70 d.C. Jerusalén fue completamente destruida. En cuanto a la Neo-Fraternidad, ha reducido el trabajo del Arzobispo a una impotencia radical, porque la red mundial de la Fe que él construyó está en absoluta necesidad de nuevos obispos para mantener esa Fe, pero por la negativa de la Neo-Fraternidad a consagrar nuevos obispos sin el consentimiento de los pachamamistas, está rechazando nuevos obispos que mantengan la fe de Mons. Lefebvre, porque los pachamamistas nunca consentirán a obispos que defiendan esa fe.

En resumen, los miembros de la Neo-fraternidad permitieron que el predecesor del P. Pagliarani honrara el lugar de sepultura de su Fundador, quien hizo más que nadie para enterrar su obra. ¿Se dan cuenta que estan contribuyendo al traslado de una obra de heroes en un parque de Neo-phariseos, obedientes al NOM?

Kyrie eleison.