autoridad

Madiran; los Obispos

Madiran; los Obispos on octubre 31, 2020

Se recordará que en el Prólogo de su libro La herejía del siglo XX, Jean Madiran atribuyó la culpa de esta herejía de manera justa y directa a los obispos católicos que precedieron y siguieron inmediatamente después del Concilio Vaticano II (1962–1965), en particular a los obispos de Francia que mejor conocía. El capítulo I de su libro mostraba, siguiendo la gran Encíclica de San Pío X Pascendi de 1907, cómo las mentes de estos obispos se volvieron no aptas para la realidad, y mucho menos para la doctrina católica, por el subjetivismo de la filosofía de Kant, que ahora reina en los departamentos de filosofía de prácticamente todas las “universidades”. En el capítulo II Madiran aborda los obispos franceses mismos en seis secciones liberamente conectadas.

En primer lugar, dice que para seguir a estos obispos tendríamos que tirar un verdadero tesoro de tesoros católicos, como San Pío X, el canto gregoriano, el tomismo, el derecho canónico, la Virgen, el patriotismo, nuestra herencia grecolatina, la piedad mariana y por último, pero no menos importante, la devoción de las viejecitas rezando. Por nuestra parte, dice, nos negamos a despreciar cualquiera de estos rasgos familiares de la familia católica. Detrás de todos ellos está el amor de Cristo, mientras que detrás de toda la charla de “reciclaje”, ” reformas” y “renovación” está el odio. Y detrás de todos los logros de la “civilización occidental” está Cristo, no la India, ni África, ni China.

En segundo lugar, a todo el mundo la Neo-Iglesia ha proclamado su apostasía: la política de los Neo-obispos ya no es convertir a nadie. Sin embargo, los fundamentos de la vida y la muerte siguen siendo exactamente los mismos. Dejemos que la Iglesia nos enseñe cómo vivir y morir. Estamos demasiado llenos del mundo. ¡Dejemos que los sacerdotes nos enseñen cómo llegar al Cielo!

En tercer lugar, estos obispos dicen que “el cambio de civilización” requiere “un concepto más evangélico de la salvación”, con lo cual quieren decir no sólo “una nueva forma de palabras”, que es lo que dicen significar, sino un nuevo contenido de las palabras, que significa una nueva religión. Sus Excelencias, nuestra respuesta es “¡NO!” Además, como católico bautizado tengo derecho a exigirles la verdadera Fe, porque su “nueva forma de palabras” en pos de un nuevo “concepto de salvación” está destinado a ser herético, no sólo torpe, sino una nueva religión, contradiciendo la verdadera Fe.

Cuarto, hasta 1966 estos obispos no habían desertado aún de la Fe Católica, pero ahora reclaman que lo suyo es por fin el cristianismo auténtico, cuando en realidad su “mentalidad post-conciliar” está rompiendo con la verdadera Fe. La verdad es que estamos en medio de una guerra entre dos religiones diferentes. Y activa o pasivamente, todos los obispos están apoyando la nueva religión. Algún obispo católico debe hablar, porque las almas están pereciendo. Mons. Lefebvre, ¿está escuchando?

No necesitamos que los obispos nos digan que seamos modernos. Todos somos demasiado modernos. ¡Pero la tecnología y la filosofía modernas no son asunto de los obispos católicos! Conocemos a los modernos y los despreciamos. Vds no los conocen y los aman. Marx, Nietzsche, Freud son meros comerciantes de fantasía. ¡Despierten!

En quinto lugar, la Neo-Iglesia está arruinando todo el aprendizaje, la enseñanza y la educación. Al querer dar a los jóvenes sólo lo moderno, que ya tienen, no se les da nada, mientras se les hace creer que lo saben todo. Así abandonados, se convertirán en los bárbaros del mañana, de modo que Vds traicionan no sólo la Fe sino toda la civilización. ¡Vuelvan a la Tradición! ¡Dios, danos verdaderos obispos!

En sexto lugar, la autoridad de los obispos se basa sólo en la verdad, la legitimidad y la ley. Si estos obispos tuvieran razón, la Iglesia de la Tradición ya no existiría. Pero la Verdad es primordialmente su asunto, por lo que no tienen autoridad para cambiar la Fe, y si lo hacen, no tienen autoridad para ser obedecidos, ni los dejaremos en paz. Esperamos de ellos la certeza, la pureza y la santidad de la inmutable Fe Católica.

(En la sección 4 arriba, el arzobispo Lefebvre no se menciona por su nombre, pero estaba en la mente de Madiran. Dos años después, el Arzobispo fundó la Fraternidad San Pío X, y el resto es historia).

Kyrie eleison.

Todavia Hay Vocaciones?

Todavia Hay Vocaciones? on octubre 10, 2020

¿Puede haber todavía vocaciones de almas jóvenes o mayores al servicio de Dios en un seminario, convento, claustro o monasterio, en medio de la angustia de la Iglesia Católica de hoy? La respuesta sólo puede ser positiva, porque el hecho es que Dios sigue llamando almas a su servicio, y “Un hecho es más fuerte que el Señor Alcalde”. Por otra parte, los superiores de los seminarios o de las casas religiosas deben tener en cuenta dos circunstancias especiales de la situación de la Iglesia de hoy, que deben hacerlos más cuidadosos que nunca en la aceptación de vocaciones bajo su techo. En primer lugar, la creciente inmadurez de las almas que crecen en el mundo moderno y, en segundo lugar, lo creciente poco que se puede confiar en los líderes de la Iglesia.

Para empezar, recordemos que la Iglesia Católica viene directamente de Jesucristo, quien la preservará hasta el fin del mundo (Mt. XXVIII, 20), y hasta la eternidad. Tiene con el Padre y el Espíritu Santo todo el poder necesario, y mucho más, para proporcionarle todos los medios necesarios para su supervivencia. Ahora bien, esos medios incluyen necesariamente un sacerdocio, obispos y sacerdotes y en alguna clase de jerarquía, para asegurar esos sacramentos que son esenciales para la vida de gracia sobrenatural de los miembros de la Iglesia. Por lo tanto, hasta el fin del mundo, Nuestro Señor siempre dará suficientes vocaciones a los hombres para garantizar que la Iglesia tenga los varones que necesita como ministros. En cuanto a las mujeres, cuya naturaleza ha sido construida por Dios para ser “ayudantes” o “compañeras” del hombre (Gen.II, 18), no deben ser sacerdotes ni tan necesarias para la Iglesia como los sacerdotes, sino que por los dones que Dios les da a ellas y no a los varones, pueden prestar a la Iglesia servicios tan preciosos que no se puede imaginar que la Iglesia no tenga vocaciones femeninas. Por ejemplo, ¿dónde estaría el apostolado de la Iglesia sin las oraciones de las Hermanas, las abuelas, etc.?

Sin embargo, Dios es Dios, y sus caminos son inescrutables para los hombres. Ver el final de Romanos XI, y todo el Libro de Job, en particular los Capítulos XXXVII a XLI. Dios llega mucho más allá de nuestras mentes humanas, y en la falibilidad de los últimos seis Papas inclusive, Él ya está llegando mucho más allá de lo que muchas mentes católicas pueden manejar. Necesitan leer a Job. Ni tampoco el Todopoderoso ha terminado todavía, de ninguna manera. Nuestra Señora nos ha dicho que el fuego caerá del cielo, eliminando una gran parte de la humanidad, y si los pecados no disminuyen, no habrá más perdón para ellos, una predicción más fácil de entender desde que la estafa de Covid hizo que muchos de los mismos eclesiásticos cerraran sus confesionarios. Oremos y trabajemos para que Nuestro Señor envíe trabajadores a su viña, pero no intentemos decirle cuántos necesita. Sólo Él lo sabe.

Mientras tanto, nosotros los seres humanos debemos confesar que, como se ha dicho sopra, ponemos al menos dos serios obstáculos en el camino de las almas que Dios llama a servirle. En primer lugar, la inmadurez de las almas que llevan una vida moderna. Si hay algo que hace madurar a un muchacho o a una muchacha para que sea capaz de soportar la disciplina de la vida religiosa o las dificultades de la vida matrimonial, es el sufrimiento, pero ¿no es la ilusión que existe hoy en día en todas partes de que el sufrimiento puede ser imputado a otra persona, puede ser evitado y no tiene por qué ser soportado? Tampoco se forman los caracteres de los niños cuando los padres cada vez saben menos cómo educarlos. Tampoco se les da mucha responsabilidad que soportar, lo que también podría madurarlos. La vida en la ciudad y en los suburbios difícilmente favorece las vocaciones.

Pero en segundo lugar, el desorden en la Iglesia también desalienta las vocaciones. Mientras la Iglesia fue, a pesar de todas las fallas humanas, una roca doctrinal y estructural de siempre, yo podía, como joven, confiarle mi vida y estar seguro de que varias capas de Superiores sobre mí funcionarían sobre una base de verdad objetiva y justicia en general. Pero desde que el Vaticano II cambió la doctrina de la Iglesia y la base sobre la que opera, ¿cómo puedo yo estar seguro de un marco objetivo y estable dentro del cual llevar el resto de mi vida? Una gran lección de esta crisis de la Iglesia es que la Iglesia Católica no puede prescindir del Papa más de lo que una marioneta puede prescindir de su titiritero – se convierte en un montón de cuerdas y pedazos de madera de colores.

Por supuesto que Dios puede proveer, y proveerá, para el bien de su Iglesia, pero difícilmente podemos esperar que las vocaciones se presenten mañana como lo hicieron anteayer.

Kyrie eleison.

La Crisis según Drexel

La Crisis según Drexel on julio 25, 2020

En los años 70 cuando Nuestro Señor (como puede creerse) dio al sacerdote y profesor austriaco P. Albert Drexel los mensajes contenidos en el folleto La Fe es Más Grande que la Obediencia, la Tradición Católica estaba aún profundamente desacreditada debido al Vaticano II. Los católicos no podían creer que habían sido tan traicionados por sus propios sacerdotes. Solo muchos años después, la Tradición comenzaría a recuperar la primacía que le corresponde en la Iglesia de Nuestro Señor. Como primero de una pequeña serie de estos “Comentarios” extraídos de los Mensajes del P. Drexel, he aquí algunas citas para mostrar cuán relevantes fueron, y son aún, para el drama sin precedentes y actual de la Iglesia.

4 de septiembre de 1970.

El número de fieles se volverá pequeño, pero su intrépida profesión de fe brillará como una luz en el mundo, y será bendecida por el poder y la gracia de la Santísima Trinidad. El sacrificio eucarístico será celebrado en casas privadas, en lugares donde el templo de Dios ha sido profanado.

6 de noviembre de 1970.

Entre los rebeldes, uno puede encontrar más y más de los siervos consagrados de la Iglesia. Estos son los que se hacen culpables del pecado de Judas, que me dio con su beso no el amor, sino el mayor dolor. Y debido a los pastores (obispos) que fueron nombrados para su cargo pero se debilitaron, los verdaderos fieles tienen que complementar con sus oraciones, sus luchas y sufrimientos lo que estos sacerdotes han descuidado y perdido. Por lo tanto, miro con gran compasión a la gente que reza y a las almas víctimas. Su sufrimiento es grande en su corazón, pero magnífico y hermoso será el amor que les espera en el umbral de la eternidad.

4 de junio de 1971.

Numerosas personas se alejarán de Mi única y verdadera Iglesia, porque han perdido la fe en el Dios Trino, y han sido engañados y cegados por malvados sacerdotes y maestros. Estos orgullosos y desleales hablan de una religión sin lo sobrenatural, sin misterio y sin oración . ¡Hablan sólo del hombre y ya no de Dios! Ponen la caridad de cabeza y dan la primacía al amor al prójimo, pero olvidan, pierden y niegan el amor a Dios con una presunción escandalosa. Intentan fundar una Nueva Iglesia, en la que el mundo y el hombre signifiquen todo, y Dios y el Cielo nada.

7 de julio de 1972.

¿Deberían estar tristes aquellos que son fieles y leales en la gracia? Es verdad que Yo mismo lloré por Jerusalén, porque sus habitantes rechazaron mi gracia. Sin embargo, es mi voluntad y la del Padre que los hijos de la fe estén alegres, como San Francisco, que alabó al Cielo con su cántico del sol, o felices como la joven Santa Teresita, que, llena de amor por Mí, caminó feliz y sonriente por el jardín de la Creación.

4 de mayo de 1973.

Numerosas personas de la Iglesia, cuyos nombres están registrados en los registros parroquiales, han perdido todo sentido de lo Santo y de los Santos. Sacerdotes consagrados al servicio del altar y de las almas se vuelven al mundo y olvidan y desprecian los mandamientos de Dios, y rinden homenaje a un espíritu peligroso del mundo. Más y más gente cae bajo la atracción de una corrupción moral, que San Juan llama la “Ramera de Babilonia” en el Apocalipsis. Lo que mi sucesor visible en Roma dijo sobre la desintegración y disolución de la fe en la Iglesia es su queja y su acusación.

7 de diciembre de 1973.

La oración de los fieles triunfará sobre las conversaciones y encuentros de aquellos que son fríos en la fe. Sin embargo, aquellos fieles a Dios siguen sufriendo, pero deben saber y considerar que los sacrificios de su sufrimiento están trayendo bendiciones sobre la Iglesia. Los que sufren de esta manera compartirán conmigo la glorificación eterna y el amor de Mi Corazón.

Kyrie eleison.

Restaurando la Autoridad

Restaurando la Autoridad on abril 22, 2019

Mientras que el pagano post-cristiano Jean-Jacques Rousseau (1712–1778) afirmaba que el hombre es por naturaleza un animal antisocial, de modo que la sociedad humana es esencialmente artificial, el pagano pre-cristiano Aristóteles (384–322), un hombre mucho más sabio, sabía que la sociedad es natural porque el hombre es por naturaleza un animal social – observe cómo se reúne con sus semejantes desde el amanecer hasta el anochecer, en todas las formas de sociedades humanas, en particular en las de la familia humana. Pero todo hombre tiene libre albedrío, de modo que todos esos tipos de sociedades deben tener a alguien en autoridad para coordinar esos libre albedríos que por sí mismos son susceptibles de dis ociarse. Por lo tanto, toda sociedad necesita autoridad, tan natural y tan necesaria para el hombre como lo es la sociedad. Vea cómo el centurión romano reconoce a Nuestro Señor como un hombre en autoridad por su propio ejercicio de autoridad en el ejército romano (Mt. VIII, 8–9).

Pero siendo la autoridad tan natural para los hombres como su naturaleza social, y su naturaleza social viniendo de Dios, entonces toda la autoridad entre los hombres debe venir en última instancia de Dios (cf. Efesios III, 15), razón por la cual en este ocaso del mundo en el que casi toda la humanidad le da la espalda a Dios, los hombres también se rebelan contra todo tipo de autoridad, y todas las clases de autoridad se vuelven cada vez más frágiles. Por ejemplo, ¿no es cada vez más común hoy en día que las esposas declaren su independencia de sus maridos y que los hijos dirijan a sus padres? Esto no es natural en ningún sentido verdadero de la palabra, pero hoy en día es cada vez más común, porque la revuelta contra la autoridad está en el torrente sanguíneo de todos nosotros. Entonces, ¿cómo puede ser restaurada la autoridad? Tenemos un ejemplo divino en el libro de Números (Cap. 16) en el Antiguo Testamento.

Moisés y su hermano Aarón eran los líderes político y religioso respectivamente del pueblo de Israel para sacarlos de Egipto a la Tierra Prometida. Ambos habían sido nombrados por Dios, como bien sabía el pueblo, pero los israelitas eran un pueblo orgulloso y de dura cerviz, y llegó el momento en el desierto cuando Coré, primo hermano de Aarón y celoso de sus privilegios, levantó a otros 250 levitas y a dos rubenitas principales, Datán y Abirón, para que se rebelaran, y el pueblo se levantó en un tumulto detrás de ellos en contra de la autoridad de Moisés y Aarón. Estos dos inmediatamente apelaron al Señor, quien les dijo que reunieran a la gente al día siguiente frente al Tabernáculo. Entonces Moisés le dijo al pueblo que se alejara de las tiendas de Datán y Abirón que estaban allí con todas sus familias extendidas, con lo cual la tierra se abrió y se tragó a los revolucionarios directamente al Infierno. Otro fuego de Dios devoró entonces a Coré y a sus 250 levitas exigiendo privilegios y prestigio dados por Dios sólo a la familia de Aarón.

De esta manera, Dios mismo demostró a quién había dado autoridad sobre los israelitas. La autoridad era muy importante para los israelitas en el desierto porque a pesar del milagroso cruce del Mar Rojo (Éxodo XIV), seguían ansiando las cebollas de Egipto, y Datán se quejaba de las penurias del desierto (Núm. XVI, 13–14). Pero Moisés no era un tirano, sino el más gentil de los hombres (Núm. XII, 3), y Aarón no había hecho daño al pueblo (Núm. XVI, 11). Sin embargo, si Dios no hubiera recurrido a un castigo extremo de los rebeldes, uno podría preguntarse si Moisés y Aarón habrían sido capaces de guiar a los israelitas a la Tierra Prometida. ¿Habría podido algo menos que eso restaurar su autoridad? Como fue, ¡es fácil imaginar que después del doble castigo milagroso ningún israelita tenía prisa por desobedecer a Moisés o a Aarón!

En 2019, el materialismo desenfrenado en todo el mundo está haciendo que cada vez menos seres humanos crean en Dios, por no decir que Lo tomen en serio. La ciencia y la tecnología parecen garantizar la buena vida para todos nosotros, así que ¿quién necesita a Dios? Y sin Él, todas las bases de la autoridad han desaparecido, y la autoridad en todas las formas de la sociedad humana se está desvaneciendo en el aire, pero especialmente en la Iglesia Católica. Además, el neo-modernismo mantiene a sus víctimas en tal control que son virtualmente inconvertibles, estando persuadidos de que siguen siendo católicos. ¿Cómo puede sobrevivir la Iglesia? Si la autoridad católica ha de ser restaurada antes del fin del mundo, ¿no será necesario otro milagroso y mortal fuego del Cielo, como con Datán, Coré y Abirón? De Dios nadie se burla (Gál. VI, 7).

Kyrie eleison.

La Femineidad, sin Precio – I

La Femineidad, sin Precio – I on octubre 6, 2018

Es donde los soldados de un ejército de asedio están tirando los muros que los defensores necesitan combatir. Es donde la salvación de las almas está siendo más obstaculizada que los siervos de Dios deben luchar más. Es por eso que estos “Comentarios” y las “Cartas del Rector” antes de éstos vuelven a menudo sobre desfeminización de las mujeres y la desvaronilización de los hombres. El diseño de Dios que hizo complementario al hombre y a la mujer, que se remonta a Adán y Eva, es básico para la naturaleza humana y la vida. Y cuando ese diseño es desgarrado por el hombre y supuestamente desechado por las locas manipulaciones de “género” etc., ¿cómo puede la gracia sobrenatural de Dios penetrar en las naturalezas humanas tan radicalmente arruinadas? Y sin gracia, ¿dónde terminan?

En teoría, las mujeres católicas no deberían tener demasiada dificultad en comprender y aceptar cómo Dios las diseñó. En la práctica, la propaganda pro-feminista es tan implacable en la educación abyecta y los medios de comunicación viles de hoy en día, que incluso los instintos naturales de las mujeres católicas y el sentido dado por Dios de su verdadero papel en la vida son a menudo abrumados por el impulso del orgullo hacia el poder aparente. He aquí algunas ásperas pero sabias palabras sobre la mujer de Irene Claremont de Castillejo, Conociendo a la mujer: Psicología Femenina:—

“Cualquier muchacha que crece hasta la adultez sin saber que el amor es su valor supremo ha sido espiritualmente violada. La espiritualidad femenina expresa una actitud de espera espiritual, de atención y de disponibilidad para el encuentro con lo opuesto, que es un requisito previo para la totalidad interior de la mujer. Sin esto, ella se convierte en presa de lo masculino dentro de sí misma, en un espíritu furioso de actividad intelectual o física con el que ningún hombre puede relacionarse, y con el cual no puede de ninguna manera relacionarse. Es una mujer poseída”.

Luego, de Henry Makow, Ph.D., La Mujer Occidental Ha perdido su Poder de Amar (corregido):—

“Las mujeres occidentales han sido engañadas, para que busquen el poder en vez del amor. Paradójicamente, nunca han sido tan impotentes. Quieren ser amadas pero ya no tienen amor que ofrecer a cambio. En la película War Games de 1983, el héroe, Matthew Broderick, es un niño mago de la informática que accidentalmente comienza una cuenta atrás nuclear y corre a evitar la catástrofe. Su novia, interpretada por Ally Sheedy, es vista en un papel complementario, básicamente ayudándole, animándole y admirándolo. Él es el líder. Pero su presencia informa, valida y realza todo lo que hace. Es como si sus acciones estuvieran dedicadas a ella. Así es como funciona la heterosexualidad. La mujer empodera al hombre confiando su poder a su marido. Así es como ama la mujer, es decir, ‘confiando’, reclutándose como Primer Oficial a su Capitán. Si esta película se volviera a hacer hoy, ella sería el capitán, él sería castrado, y ellos romperían.

“Desde Chaucer a Freud, los hombres han preguntado: ‘¿Qué quieren las mujeres?’ Es realmente muy simple. Quieren ser amadas. Específicamente, quieren el amor apasionado de toda la vida de un marido. ¿Pero qué hace que un hombre ame a una mujer de esta manera? Su sacrificio. Uniéndose a él, aceptando su liderazgo y sirviéndole a él y a sus hijos. En otras palabras, el amor duradero se gana con las obras. No se basa en el sex-appeal (que se desvanece) o en conversaciones ingeniosas. Se construye con lazos de GRATITUD.

“Enseñando a las mujeres a ser egoístas en vez de sacrificarse a sí mismas, el feminismo las ha privado de su poderío, el amor. Todo lo que les queda por dar es el acto del matrimonio sin matrimonio. Porque no se rinden a un esposo cariñoso, se reducen a entregarse a extraños” (Fin de la cita de Makow).

“Pero, Excelencia, ¿dónde están los Capitanes? ¿Dónde están los potenciales maridos amorosos que nos guiarán? Los hombres de hoy están en la ruina, sin excluir a los católicos tradicionales”. Muchachas, al igual que ustedes han sido des-feminizadas sin que se den cuenta, ellos han sido castrados por la despreciable cultura de hoy en día. Deben orar, porque Dios les puede encontrar fácilmente un joven. Recen a Santa Ana, como arriba, pero antes que nada, prométanle que si ella les encuentra un hombre, están listas y dispuestas a someterse a él. Así estará más inclinada a buscárselos. Entonces tuerzan su brazo. Al Cielo esto le complace. —Luc. XVIII, 2–8.

Kyrie eleison.

Cuarto Obispo

Cuarto Obispo on marzo 11, 2017

Desde el verano del 2012 cuando la Fraternidad San Pío X decidió oficialmente cambiar el rumbo y abandonar la posición de primero-doctrina tomada por Monseñor Lefebvre 40 años antes, ha sido interesante observar a la Providencia en acción para asegurar la defensa de la Iglesia. Se pudo haber esperado un levantamiento generalizado en defensa de la Verdad de Dios. ¿Resistencia desde dentro de la Fraternidad? Existente pero, al menos hasta ahora, mayormente silenciosa. ¿Y desde fuera? Existente pero solamente una dispersión de laicos y un puñado de sacerdotes separados por divisiones debido a la carencia de una autoridad reconocida. Los Católicos necesitan autoridad. Y esa necesidad es tan grande que, aún cuando la Verdad está agotándose en la neo-Iglesia centrada en el hombre y en la neo-Fraternidad centrada en Roma, aún así las almas se aferran a las dos debido a los remanentes de autoridad Papal en la primera y a los remanentes de autoridad católica legada a la segunda por Monseñor Lefebvre.

Pero la Verdad permanece siendo la finalidad de la Autoridad y la Autoridad no es la finalidad de la Verdad. Dada la pobre naturaleza humana, la Autoridad es la indispensable defensora y garante de la Verdad, pero ésta viene después de la Verdad y no antes. Tomen por ejemplo una de las últimas instrucciones de Nuestro Señor a Pedro antes de dejarlo para gobernar la Iglesia (Luc. XXII, 31–32): “Simón, Simón, mira que Satanás os (plural) ha reclamado para zarandearos como se hace con el trigo. Pero Yo he rogado por ti (singular) , a fin de que tu fe no desfallezca (Verdad) . Y tú, una vez convertido (Verdad) , confirma a tus hermanos (Autoridad) ”. Y unos días antes, el Domingo de Ramos, los fariseos habían intentado reprender a Nuestro Señor por el gozoso ruido que estaban haciendo Sus discípulos, pero tan necesaria es la adoración en la Verdad a Dios que Nuestro Señor les replicó (Luc. XIX,40): “Os digo, si estas gentes se callan, las piedras se pondrán a gritar”.

En la neo-Iglesia de hoy, la Autoridad está mezclando el error Conciliar con la Verdad Católica en el motor de la Iglesia, lo cual es como mezclar agua con gasolina en el motor de un auto – el auto está paralizado, la Iglesia está paralizada. Y mientras que Monseñor Lefebvre desafió esa parálisis, no solamente, pero sobretodo mediante su consagración de cuatro obispos para mantener una autoridad Católica que protegiera la Verdad de Dios, ¡sus sucesores a la cabeza de lo que una vez era su Fraternidad, están haciendo el máximo esfuerzo para someter su protección de la Verdad a la paralizada e paralizante Autoridad de Roma! Si estos sucesores seriamente piensan que una vez que estén “dentro de la Iglesia oficial” podrán estar en posición para convertir a los neo-modernistas, ellos son excesivamente ingenuos. Ya ellos han dejado de abrir fuego en contra el Vaticano II. ¿Cuándo se imaginan que serán capaces de abrir fuego de nuevo?

En estas bien excepcionales circunstancias, debe haber discípulos de Nuestro Señor que digan la Verdad – ¡para evitarle a las piedras el esfuerzo! Estos discípulos pueden no estar unidos como lo estarían bajo una verdadera Autoridad (siempre tomando en cuenta la debilidad humana). Ellos pueden ser “atribulados y derribados”, ellos pueden sufrir “tribulación y persecución” (cf. II Cor. IV, 8–9) pero ellos tienen que estar ahí por todo el tiempo que la Verdad esté mantenida en cautiverio. ¿Será por mucho tiempo? Dios sabe. Muchos de nosotros esperábamos que Él interviniera hace tiempo, pero Dios tiene una mecha muy larga en su detonador. Sin embargo, Él intervendrá, si es que algo todavía queda para ser salvado. Paciencia.

Mientras tanto estos discípulos necesitan un puñado de obispos que aseguren una mínima continuación en la Verdad de la enseñanza episcopal y los sacramentos de Confirmación y Orden Sagrado. En 1988, Monseñor Lefebvre consagró cuatro de ellos por la misma razón, dos para Europa, uno para Norte América y otro para Sudamérica. Hasta ahora, la “Resistencia” tiene dos en Europa y uno en Sudamérica. Queda un vacío en Norte América. Si Dios quiere, el próximo 11 de mayo el Padre Gerardo Zendejas será consagrado obispo en la parroquia Tradicional del Padre Ronald Ringrose en Vienna, Virginia, Estados Unidos. Por favor recen por la bendición de Dios Todopoderoso sobre esta ceremonia – ¡Y por buen tiempo!

Kyrie eleison.