Palestina

¿Dios Vengador?

¿Dios Vengador? on agosto 2, 2014

La última horrible arremetida desatada contra los prácticamente indefensos palestinos en Gaza puede plantear en las mentes de muchas personas un obstáculo al verdadero culto de adoración al verdadero Dios, porque es bien conocido que muchos de los israelitas de hoy en día alegan que tienen del Antiguo Testamento un derecho otorgado por Dios para tomar toda la tierra ocupada por los palestinos, a la fuerza de ser necesario. Una persona razonable puede hacer dos preguntas: ¿Qué clase de un Dios puede aún remotamente ser mobilizado para ‘justificar’ tan bárbara crueldad, junto con tan total desprecio por cualquier opinión del mundo condenando tal barbaridad? Y, ¿Qué clase de ‘Pueblo Elegido’ son éstos? La respuesta a ambas preguntas gira alrededor de Nuestro Señor Jesucristo alrededor de quien, por supuesto, gira toda la historia de la humanidad.

El Antiguo Testamento narra la historia de la humanidad antes de Cristo, especialmente la historia de los israelitas, el pueblo que Dios escogió de entre el resto de la raza humana para actuar como la cuna del Dios Encarnado, Jesucristo, cuando bajara del Cielo. Alrededor de unos mil años luego de Adán, la humanidad había crecido tanto en corrupción que Dios tuvo que hacerla desaparecer y comenzar de nuevo con las ocho almas salvadas en el Arca de Noé. Alrededor de otros mil años más tarde, la humanidad es de vuelta tan corrupta que Dios tiene que arrancar a Abraham de la degenerada ciudad de Ur para ser el fundador de una raza que debe permanecer limpia de toda la contaminación humana circundante, con el objeto de que sea suficientemente limpia como para actuar como esa cuna. Aquí está el origen de esa exclusividad racial observable en los judíos desde entonces. Ella comenzó con Dios, pero ha caído en las manos de los hombres.

Entonces los judíos fueron ciertamente una vez, por causa de Jesucristo, el Pueblo Elegido. Así Santo Tomás de Aquino tiene un tremendo artículo en su Summa Theologiae donde demuestra como cada detalle en particular en el equipo del Templo exclusivo de los Israelitas en Jerusalén señalaba hacia adelante, a Jesucristo (Ia IIae, 102, 4). Sin embargo, para limpiar la Tierra Prometida para que los Israelitas tomaran posesión de ella, no hay duda que Dios Todopoderoso les dio más de una vez el comando de exterminar totalmente a los paganos que ocupaban la tierra, y El castigó al Rey Saúl severamente por no observar este comando al pie de la letra (I Rey. XV). ¿Qué podía justificar tal comando?

Es lo mismo que explica como Dios vino a exterminar toda la humanidad (excepto ocho almas) en el tiempo de Noé. En primer lugar, los pecados de los hombres. Dios crea a los hombres para el Cielo, ellos eligen el pecado que merece el Infierno. Pues ciertamente el pecado ofende a Dios primero de todo. Entonces el sentido de Dios y el sentido del pecado se pierden juntos, como todo alrededor nuestro hoy en día. Una generación atea como la nuestra no tiene manera alguna de comprender la justicia de Dios. En segundo lugar, la misericordia de Dios que va mano a mano con Su justicia y que es hoy en día igualmente incomprendida. Pero, dada la realidad del Infierno, ¿no es una misericordia de Dios si El pone fin a la existencia de los hombres de manera que ellos puedan arrepentirse antes que mueran o, al menos, parar de pecar para que no merezcan ir más abajo en el Infierno?

Así es como habrá sido con los enemigos paganos de los israelitas entre Abraham y Jesucristo. Leer el Antiguo Testamento es ver cuan a menudo los israelitas estaban tentados de abandonar al verdadero Dios y de rendir culto a los diablos por los paganos todo alrededor de ellos. Como el Santo Cura de Ars dijo una vez, ‘Acaben con el sacerdote, y en 25 años los hombres estarán rindiendo culto a las bestias’. Es para crédito eterno de los israelitas que ellos ciertamente tuvieron buen éxito en proveer la cuna para el Mesías, por ejemplo San Joaquín y Santa Ana, especialmente su niña, la Santísima Virgen María, los 12 Apóstoles y todos los otros buenos israelitas que ayudaron a lanzar la Iglesia Católica de su Mesías. Para los israelitas de hoy en día, vean la próxima semana.

Kyrie eleison.

Mas Aliento

Mas Aliento on mayo 11, 2013

Las noticias de la visita de una semana a Alemania, Francia y Suiza, son alentadoras. Algunos líderes harían bien en recordar las famosas palabras de Abraham Lincoln: “Se puede engañar a algunas personas todo el tiempo, a todas las personas algún tiempo, pero no a todas las personas todo el tiempo.” Cada vez menos personas están siendo engañadas por lo que está pasando dentro de la Neofraternidad San Pío X.

El viaje comenzó en Alemania donde algunas personas temían que pudiera enfrentarme a dificultades, pero por cuatro días no fui molestado de ninguna manera. Un buen joven laico me recogió en la enorme estación ferroviaria de Frankfurt y me condujo hacia el norte a Brilon Wald para reunirme con la media docena de Hermanas Carmelitas que se han vuelto famosas a través de todo el mundo de la Tradición católica por haberse separado ellas mismas, por todas las razones correctas, de la FSPX en su estado actual. Ellas tienen la mente clara y son resueltas y joviales. Como me dijo la Madre Superiora, la mayor pena de ellas es que por más de 20 años ninguna de las novicias ha perseverado con ellas. Las Hermanas Carmelitas no están siendo expulsadas de su convento actual, como se había temido, pero esperan mudarse al sur para alcanzar un mayor apoyo local. Que Dios esté con ellas. Sus oraciones son preciosas para todos nosotros.

Luego fui conducido de vuelta al sur de Frankfurt para dirigir la palabra en una reunión privada de dos docenas de adultos, mayormente varones, en un ambiente campestre. En la tarde escucharon atentamente un análisis profundo sobre los antecedentes de las crisis del Nuevo Orden Mundial y de la Neo-Iglesia y, en la mañana siguiente, una presentación de los problemas de primer plano en la Neo-Fraternidad. Hubo abundancia de buenas preguntas y una buena cantidad de vigorosos cánticos por parte de los compatriotas de Beethoven. ¡Los pájaros primaverales en los árboles alemanes tuvieron un buen reto!

Más al sur, en Múnich, me reuní con los dos abogados que van a batallar por mi en mi quinto proceso por negación de “Holocausto.” En este proceso que debe tener lugar en Ratisbona en Septiembre, ellos son bien conscientes de que la política nacional hace que un veredicto justo a nivel regional sea virtualmente imposible, pero harán lo mejor que puedan. Precisamente porque los Seis Millones sirven de Redentor sustituto en millones de mentes, no tuve escrúpulos en remunerar a los abogados con la St Marcel Initiative, pero sus fondos se están agotando. Gracias por toda y cualquier ayuda.

Luego viajé a la Selva Negra en el sudoeste de Alemania donde hay otra comunidad de media docena de Hermanas, igualmente joviales y decididas a no seguir la actual mala dirección de la FSPX. Fundadas en 1988, han terminado recientemente de construir y decorar una hermosa capilla con alrededor de dos docenas de sillería del coro “como un signo de esperanza,” me dijo su capellán. Jovencitas, si ustedes piensan que ustedes pueden tener una vocación, aquí hay dos conventos firmemente anti-modernistas en Alemania que ustedes pueden probar.

Finalmente, una noche en Suiza cerca de, pero desconocido para, Ecône, donde ellos pudieron haberse enterado solamente después que estuve de paso para reunirme con un grupo de buenos laicos. Y una noche en París donde escuché para mi deleite que muchos sacerdotes de la FSPX en Francia han perdido toda confianza en el manejo actual de la FSPX. Seamos pacientes. Dios Todopoderoso no se deja engañar por ninguno de nosotros.

Mi próximo compromiso es en Londres el 19 de Mayo, cuando dirigiré la palabra a los Amigos Británicos de Palestina sobre Hamlet. ¿Por qué? En esa obra Shakespeare clama con dolor la pérdida del alma inglesa. Si Inglaterra fuera todavía católica, no solamente Palestina sino todo el mundo estaría en mejor situación.

Kyrie eleison.

Orgullo Ancestral

Orgullo Ancestral on octubre 15, 2011

En el segundo volumen acerca de la vida de Jesús publicado hace varios meses, el Papa Benedicto XVI hizo comentarios que les permitió a los periodistas saltar a la conclusión de que los Judíos ya no deben de señalárseles como responsables de deicidio, esto es el asesinato de Dios. Peor aún, el 17 de Mayo el director ejecutivo del Secretariado de la Comisión Episcopal de Relaciones Ecuménicas e Inter-religiosas de los EUA dijo que uno no puede acusar a la gente Judía de deicidio en ningún momento de la historia sin dejar de estar en comunión con la Iglesia Católica. En oposición a lo que mucha gente hoy en día quiere pensar, es tiempo de recordar aunque sea brevemente, lo que la verdadera Iglesia siempre solía enseñar acerca de la asesinato judicial de Jesús.

En primer lugar, el asesinato de Jesús fue verdaderamente “deicidio,” el asesinato de Dios, porque Jesús era una de las tres Personas divinas que en adición a su naturaleza divina había tomado una naturaleza humana. ¿Qué se murió en la Cruz? Únicamente la naturaleza humana. Pero ¿a quién se le asesinó en la Cruz en su naturaleza humana? Ni más ni menos que a la segunda divina Persona, esto es, a Dios.

En segundo lugar, Jesús murió en la Cruz para salvarnos a todos nosotros, seres humanos pecadores, de nuestros pecados, y en este sentido todos los hombres fueron y siguen siendo el fin de su muerte. Pero únicamente los Judíos (líderes y pueblo) fueron los agentes primarios del deicidio, porque es obvio de los Evangelios que el Gentil más involucrado, Poncio Pilato, nunca hubiera condenado a Jesús a muerte si los líderes Judíos no hubieran levantado entre la gente el clamor para su crucifixión (Mateo XXVII, 20). Ciertamente los líderes doctos eran más culpables que el pueblo ignorante, dice Sto. Tomás de Aquino (Suma III, 47, 5), pero todos en unísono aclamaron para que su sangre cayera sobre de ellos y sobre de sus hijos (Mateo XXVII, 25).

En tercer lugar, al menos el Papa León XIII consideró que había una verdadera solidaridad entre los Judíos que clamaban en ese entonces para que Jesús fuese asesinado, y la colectividad de los Judíos de los tiempos modernos. ¿Acaso no en su Acto de Consagración del Genere Humano al Sagrado Corazón de Jesús hizó a la totalidad de la Iglesia, desde finales del siglo 19 y en adelante, rezar a Dios para que tornara sus “ojos de misericordia hacia los hijos de esa raza, alguna vez el pueblo elegido de Dios: desde tiempos remotos clamaron sobre de ellos la Sangre del Salvador; descienda ahora sobre ellos un bautismo (como un lavado) de redención y de vida”?

Pero León XVIII de ninguna manera está solo al observar dicha continuidad entre los Judíos a través de los siglos. ¿Acaso no reclaman ellos mismos hoy en día la tierra de Palestina basados en que es suya por el derecho otorgado por Dios en el Antiguo Testamento? ¿Ha habido en la faz de la tierra alguna raza-pueblo-nación tan orgullosamente auto-identificante a través de todos los tiempos? Originalmente elevados por Dios para acunar al Mesías, Dios mío, cuando él vino se rehusaron colectivamente a reconocerlo. Colectivamente también, con lo que se puede entender que siempre existen nobles excepciones, han permanecido fieles a ese rechazo, por lo que cambiaron su religión de la de Abraham y Moisés y del Viejo Testamento a aquella de Anás, Caifás y del Talmud. Trágicamente, su mismo entrenamiento divino para el Mesías los lleva a rechazar a aquel que les parece un falso mesías. Hasta que se conviertan al final del mundo, como la Iglesia siempre lo ha enseñado (cf. Rom. XI, 26–27), parecen estar obligados a elegir seguir actuando, colectivamente, como enemigos del verdadero Mesías.

¿Como es posible que Bendito XVI pierda verdades tan antiguas?

Kyrie eleison.