Prelatura Personal

Todavía Deslizándose – I

Todavía Deslizándose – I on noviembre 2, 2019

Ha habido señales para dar esperanzas de que la Fraternidad oficial San Pío X ya no se desliza bajo el poder y control de los eclesiásticos conciliares en Roma, pero tales señales están abrumadas por la evidencia de lo contrario. Por ejemplo, el 12 de septiembre, el nuevo Superior General (SG) que fue elegido para sustituir a Mons. Fellay en julio del año pasado, el P. Davide Pagliarani, hizo pública una entrevista en la que dijo muchas cosas buenas, suficientes para que al menos uno de los lectores de estos “Comentarios” se alegrara de que el deslizamiento de la Congregación fuera en reversa. Desgraciadamente, un informe reciente de la sede de la Fraternidad en Suiza nos hace temer que al P. Pagliarani se le ordene decir cosas tan conservadoras para engañar a todos los Tradicionalistas que no observan sus acciones. Aquí están los antecedentes y el informe.–

La Tradición Católica tiene casas en Francia de tres Órdenes excepcionales de monjes y frailes del pasado de la Iglesia: los Benedictinos en Bellaigue, los Dominicos en Avrillé, los Franciscanos en Morgon. Los tres fueron alentados y ayudados a comenzar en su día por Mons. Lefebvre, pero nunca reclamó autoridad sobre ninguno de ellos, de hecho se negó positivamente a hacerlo, porque no veía que la Fraternidad tuviera la misión de monopolizar la Tradición o de controlar todas las iniciativas Tradicionales. Desde su fundación, las tres casas independientes han florecido, relativamente hablando, y en 2019, como es normal para monjes y frailes, las tres ejercen una influencia especial sobre los Tradicionalistas de todo el mundo, se podría decir.

Sin embargo, con el gran cambio de dirección de la Fraternidad que se hizo público en 2012, las relaciones de estas casas con la Fraternidad se han vuelto problemáticas, porque sus líderes naturalmente han querido que estos religiosos influyentes también cambien de dirección. Hace algunos años, la FSSPX rompió las relaciones con los Dominicos de Avrillé, considerados demasiado independientes, mientras que los Franciscanos han necesitado durante el mismo período de tiempo adoptar una política cuidadosamente equilibrada entre cooperación e independencia. Y en cuanto a los Benedictinos, su joven Superior de Brasil, Dom Placide, fue objeto de una especial presión el pasado mes de agosto por parte de la Fraternidad.

Llamado a Menzingen por el P. Pagliarani, fue reprendido por su falta de cooperación con la Fraternidad, y se le presentó un papel por el cual ¡debía ceder a la Fraternidad todo el control sobre el Monasterio Benedictino! Cuando, para expresarlo cortésmente, rechazó la oferta, se le amenazó con que se le diría a todo el mundo que la FSSPX estaba cortando todas las relaciones con el Monasterio. Dom Placide respondió que correspondía al SG hacer lo que él consideraba mejor, después de lo cual la amenaza cambió. Ahora la amenaza era que a todos los prioratos de la Fraternidad se les ordenaría que no enviaran más vocaciones a Bellaigue. Y esta amenaza se ha cumplido. Dom Placide rechazó la oferta de quedarse a almorzar en Menzingen.

Tenemos derecho a especular sobre tal conversación. Si queremos mantener nuestras esperanzas en el P. Pagliarani en lo personal, podemos especular que él mismo fue dirigido a usar tales tácticas intimidatorias contra el relativamente joven jefe de los Benedictinos. Pero no puede eludir la responsabilidad de al menos consentir en actuar el papel del acosador. Más grave aún, las tácticas intimidatorias sugieren que Roma y Menzingen están conspirando conjuntamente para barrer juntos bajo la Fraternidad todas las agrupaciones Tradicionales actualmente independientes, y luego reestructurar la Fraternidad y reemplazarla por una Prelatura Personal bajo el control total de la Roma Conciliar. Esto tendría dos ventajas para la guerra de Roma contra la Tradición: en primer lugar, la independencia y las últimas huellas de Mons. Lefebvre en la estructura de la Fraternidad que él diseñó desaparecerían, y en segundo lugar, Roma podría entonces estrangular suavemente, junto con la Fraternidad, a todas las agrupaciones e iniciativas Tradicionales de un solo golpe. Tampoco los dirigentes actuales de la Fraternidad desaprobarían la caída en picado, al contrario, porque cuando mueran por el estrangulamiento, al menos tendrían el reconocimiento oficial por el que han luchado durante tanto tiempo.

Así actuan los embaucadores de la Fraternidad. Pero ¿qué hay de sus seguidores, sacerdotes y laicos?

Kyrie eleison.

Las Divergencias Evolucionan

Las Divergencias Evolucionan on agosto 12, 2017

¿Cómo está evolucionando la Fraternidad San Pio X desde la primavera y principios del verano cuando surgieron fuertes tensiones en ella por la participación de sacerdotes conciliares como testigos oficiales en los matrimonios de la Fraternidad? En breve, las relaciones continúan siendo tensas entre los líderes de la Fraternidad que favorecen esa participación y los sacerdotes y laicos de la Fraternidad que la condenan. Incluso se puede prever una división entre los seguidores de Mons. Lefebvre y los seguidores de Mons. Fellay. Esta división era inevitable desde el día en que Mons. Fellay comenzó a dirigir la Fraternidad del Arzobispo en una dirección diferente a la del mismo Arzobispo.

Pero nada afecta la determinación del Menzingen de Mons. Fellay de apartarse de la línea trazada por el Arzobispo hacia la línea de la Roma Conciliar. Recientemente en Francia, una pareja de la Fraternidad comprometida en matrimonio rechazó tener algo que ver con las autoridades conciliares, tras lo cual su sacerdote de la FSSPX se negó a casarlos. Obviamente él tenía el apoyo de sus Superiores. ¿Tiene una explicación racional esta insistencia en desmantelar la Fraternidad del Arzobispo? Tres factores pueden estar obrando, entre otros.

En primer lugar, la Providencia escogió a Suiza para que fuera la primera base geográfica de la Fraternidad, y Suiza ha disfrutado desde entonces la correspondiente importancia y prestigio dentro de la FSSPX. Así, sus dos autoridades superiores en la actualidad, y muchos de sus sacerdotes, son ciudadanos suizos. Ahora bien, Suiza es un país famoso por su orden, por ejemplo, por cómo sus trenes circulan a tiempo, mientras que la falta de reconocimiento oficial para una Congregación verdaderamente católica es normalmente un desorden que será más agudamente sentido por gente ordenada. En segundo lugar, los sacerdotes de la FSSPX deben estar soñando en cómo un extenso apostolado se abrirá a la Fraternidad si tan solo puede ser reconocida por Roma. Y en tercer lugar, puede no parecer haber otra solución a las graves tensiones internas en la Fraternidad que ponerla bajo la autoridad de la Roma Conciliar – Mons. Fellay no quiere escuchar soluciones apocalípticas, tal como una intervención de Dios.

Pero en primer lugar, el orden supremo para los católicos no es el orden del Estado, por muy deseable que esto pueda ser, sino el orden de Dios, pisoteado por el Vaticano II. En segundo lugar, los modernistas por su naturaleza pueden dar todas las apariencias de estar “convertidos” porque no ven ningún problema en su propio subjetivismo. Pero este liberalismo es tan cómodo que pocos tengan cualquier intención de abandonarlo por cualquier conversión objetiva que involucre la Cruz. Como dijo el P. Vallet, los liberales no se convierten. Y en tercer lugar, pensar que la única solución para los problemas sin precedentes del mundo y de la Iglesia de hoy es consentir con las mentiras, delata una grave falta de fe, por más triunfante que puedan parecer esas mentiras. ¿De verdad pensamos que el brazo de Dios se acorta porque nosotros los hombres somos malvados (Isaías L, 2; LIX, 1)? Dios sabe exactamente cómo va a lidiar con las mentiras sin precedentes – nos basta esperar para verlo – ¡pero entretanto Él no quiere que consintamos con ellas!

Sin embargo, también hay buenas noticias – algunos sacerdotes y laicos que rechazan consentir con las mentiras también están decididos. Un lector en Francia me dice que algunos sacerdotes de la FSSPX se han despertado con el problema concreto sobre los matrimonios. Lo mejor de los sacerdotes de la FSSPX no están recurriendo a los testigos conciliares para los matrimonios en la Fraternidad, para disgusto de sus Superiores. Tres de los Decanos degradados han escrito fuertemente contra los testigos conciliares para los matrimonios, incluso después de su degradación, y uno acaba de hablar enérgicamente contra la Prelatura Personal, porque de ninguna manera está fuera de discusión, a pesar de la Declaración contundente del Cardenal Müller a finales de junio.

De ninguna manera con aquella Declaración “regresamos al punto de partida”, como declaró Mons. Fellay en su momento. “Como un mal administrador acorralado”, dice este lector, “ha perdido toda la confianza de los cofrades con cerebro en su cabeza, incluso los más respetuosos”. Lo que importa ahora, concluye el lector, no es salvar toda la FSSPX en su totalidad, porque se requeriría un milagro, sino salvar a tantos sacerdotes y laicos como sea posible de la decadencia de la FSSPX.

Kyrie eleison.

¿Aliado Benevolente?

¿Aliado Benevolente? on enero 28, 2017

Mons. Athanasius Schneider, originario de Alemania pero ahora Obispo de Astaná en Kazajstán, se ha dado a conocer a los Tradicionalistas en los años recientes por sus muchas declaraciones que por lo menos parecen favorables a la Tradición Católica. Por ejemplo, el año pasado se asoció públicamente con el cuestionamiento de los cuatro Cardenales a la doctrina del Papa Francisco en el documento papal Amoris Laetitia. Cuando él hace mucho para criticar a la Iglesia que oscila hacia la “izquierda”, puede que no entienda o aprecie el ser atacado por la “derecha”, pero es la Verdad que está en juego, no nuestras pequeñas personalidades. Su Excelencia, gracias por tanta verdad que ha tenido Usted el valor de defender abiertamente, pero entienda que la Verdad completa es mucho más fuerte, y más exigente, de lo que piensa. Usted recientemente dio una entrevista a Adelante la Fe. Por favor, no lo tome personal si cito (en cursivas) algunas de sus respuestas y las critico:—

Estoy convencido que en las circunstancias actuales Mons. Lefebvre aceptaría sin dudarlo la propuesta canónica de una prelatura personal”.

Su Excelencia, eso es imposible. Mons. Lefebvre creía, y lo probaba con argumentos de la teología e historia de la Iglesia, que el Vaticano II fue una traición sin precedentes, por parte de las más altas autoridades en la Iglesia, a 1900 años de doctrina inmutable de la Iglesia. Pero la Roma oficial todavía sigue ese concilio objetivamente traidor. Por lo tanto, poner a la FSSPX bajo esta Roma será como poner un zorro a cargo del gallinero. El Arzobispo siempre tuvo la esperanza de que Roma viniera a la derecha. Aún no lo ha hecho.

Mons. Lefebvre era un hombre con un profundo sensus eclessiae, o sentido de Iglesia.

Esto es verdad, porque sobre todo él tuvo una comprensión profunda y clara de la doctrina católica, o enseñanza, que es el corazón de la Iglesia. “Id y ENSEÑAD a todas las naciones”, fue la última instrucción de Jesús a sus Apóstoles (Mat. XXVIII, 20). El Vaticano II traicionó la doctrina católica, por lo que el profundo sentido de Iglesia del Arzobispo lo hizo repudiar ese Concilio. Los Conciliaristas actuales en Roma nunca podrán reconstruir la Iglesia.

Él consagró cuatro obispos en 1988 porque estaba convencido que había un real estado de necesidad. Fue la crisis objetiva que dio origen a la convicción subjetiva, y no al contrario. Nuestro mundo moderno está enfermo mentalmente con el subjetivismo. El Arzobispo era un objetivista.

Si la FSSPX permanece mucho tiempo de forma autónoma canónicamente, sus miembros y seguidores perderán el sentido de la necesidad de sujeto al Papa, y terminarán dejando de ser católicos.

El Papa es Papa para “confirmar a sus hermanos” en la Fe. Ver Lucas XXII, 32. Si él es un Papa Conciliar con su fe corrompida por el Vaticano II, ya no puede dar lo que no tiene. Es por estar sujetos a los Papas Conciliares que incontables católicos desde el Concilio han perdido la verdadera Fe.

Ningún católico puede escoger a cuales Papas estará o no estará sujeto. Dios guía a su Iglesia.

La presente crisis en la Iglesia es sin precedente porque nunca antes en la historia de la Iglesia hubo una serie de Papas desalineados con la Fe verdadera como hemos visto desde el Vaticano II. Esto significa que los Católicos deben – excepcionalmente – juzgar a sus Papas, obispos y sacerdotes. Por esta crisis Dios está purificando Su Iglesia, y cuando la purificación esté completa, Él concederá a Su Iglesia un gran Papa verdaderamente católico.

Le he dicho a Mons. Fellay, nosotros en Roma precisamos de la FSSPX en el gran combate por la pureza de la Fe.

Excelencia, crea que la Roma conciliar hará todo lo posible para completar la corrupción de la Fe de la FSSPX. Ya la FSSPX oficial se ha deslizado lejos de la Fe objetiva del Arzobispo.

Kyrie eleison.

Secuela de las Discusiones

Secuela de las Discusiones on junio 18, 2011

A medida que las Discusiones doctrinales que se llevaron a cabo desde el otoño del 2009 hasta la primavera de este año entre la Fraternidad de San Pío X y Roma se alejan en el pasado, la pregunta surge naturalmente en relación a las futuras relaciones entre las mismas. Entre Católicos de ambos lados existe un deseo de continuar con los contactos, mas debido a que dichos deseos piadosos de unión fácilmente alimentan las ilusiones, es necesario mantener contacto con la realidad si uno no quiere dejarse arrastrar por la locura anti-Dios que ha embriagado ya casi todo el mundo moderno.

Originalmente las Discusiones fueron buscadas no por la Fraternidad sino por Roma, ya que esperaba disolver la resistencia notoria de la Fraternidad hacia el Neo-modernismo del Vaticano II. El gran obstáculo era la doctrina, porque la Fraternidad está bien protegida dentro de la fortaleza de la doctrina antigua e inmutable de la Iglesia. Tenía que ser atraída fuera de esta fortaleza. Ahora para los Neo-modernistas, al igual que para los comunistas, cualquier contacto o diálogo con un adversario en una postura segura era – y aún es – mejor que nada, porque el adversario solamente puede perder a través de este encuentro mientras ellos solo pueden ganar. Así es que Roma acepto inclusive las Discusiones doctrinales.

Desgraciadamente para Roma, los cuatro representantes de la Fraternidad creen claramente y se mantuvieron firmes. Como a uno de los cuatro teólogos Romanos que participaron en las discusiones se le oyó decir después, “Nosotros no los entendemos y ellos no nos entienden.” Claro. A menos que los Romanos abandonaran su Neo-modernismo o los sacerdotes de la Fraternidad traicionaran la Verdad, era seguro que el diálogo resultaría relativamente infructífero. Pero Roma no puede soportar que su propia traición de la Verdad sea mostrada por la insignificante Fraternidad, y por eso es poco probable que se rinda. Esa es la razón por la que ya escuchamos de un vocero de Ecclesia Deique muy pronto Roma ofrecerá un “Ordinariato Apostólico” a la Fraternidad. Ciertamente esa cita puede ser no más que un sondeo para probar las reacciones, pero también es una idea tentadora. A diferencia de una Prelatura Personal, el Ordinariato Apostólico es independiente de los obispos locales y a diferencia de la Administración Apostólica, como la de Campos en Brasil, no está confinada únicamente a una diócesis. ¿Qué más podría pedir la Fraternidad?

Pide que Roma regrese a la Verdad porque sabe, como los Comunistas y los Neo-modernistas, que cualquier colaboración práctica a la que se llegue al amparo de un desacuerdo doctrinal la llevará eventualmente, por un sinfín de razones humanas, a absorber la falsa doctrina de los enemigos de la Fe, en otras palabras a traicionar la Verdad. Esta es la razón por la cual el Superior General de la Fraternidad ha repudiado en público en reiteradas ocasiones cualquier arreglo canónico con Roma que preceda a un acuerdo doctrinal. Mas las Discusiones por lo menos han servido para demostrar lo profundo del desacuerdo doctrinal entre la Fraternidad y la Roma Neo-modernista. Esa es la razón por la cual los Católicos deben de estar preparados para que la Fraternidad rechace aún el ofrecimiento de un Ordinariato Apostólico, por muy bien intencionadas que parezcan las autoridades Romanas.

Pero ¿por qué es la doctrina tan importante? Porque la Fe Católica es una doctrina. Y ¿por qué es la Fe tan importante? Porque sin ella no se puede agradar a Dios (Heb. XI,6). Pero ¿por qué debe de ser la Fe Católica? ¿Acaso no sería suficiente con cualquier otra fe en Dios? No, porque Dios mismo sufrió el horror de la Cruz para revelarnos la única Fe verdadera. Todas las otras “fes” contradicen de una manera u otra, la verdadera Fe, y son entonces más o menos mentirosas. ¡Y Dios no es un Dios de mentiras!

Cuatro números a venir de “Comentarios Eleison” mostrarán, con todo el debido respeto, lo desorientado que está en este respecto el pensamiento del Papa actual, por muy bien intencionado que también sea.

Kyrie eleison.