música

Polémica Sobre Mozart

Polémica Sobre Mozart on junio 2, 2018

Después de que el número 550 de estos “Comentarios” elogiara a Mozart (27 de enero de 2018), un lector escribió en privado para decir que tenía un problema con el famoso compositor: Mozart fue un masón entusiasta, en la segunda mitad de su vida no realizó ninguna obra importante para la Iglesia Católica, y sus óperas tratan las relaciones hombre-mujer y la moral de una manera muy casual. Ahora bien, la música es tan importante en el alma de las personas que las objeciones de este lector merecen ser contestadas en público, para que las personas que aún no conocen a Mozart puedan ser alentadas, obviamente no forzadas, a hacer de él la música de sus momentos de esparcimiento. Así que vamos a destacar algunos principios para cada una de las tres objeciones del lector.

El hecho de que Mozart fuera masón plantea un principio muy importante: el artista y su arte no están separados, sino que son distintos. Lo que hace la bondad moral del artista como persona no es lo mismo que lo que hace la bondad artística de los artefactos que produce (Summa Theologiae, 1a 2ae, Q57, Art. 3). Así pues, Picasso era un sinvergüenza personal, pero su arte, puramente artístico, es brillante, mientras que incontables pintores victorianos pueden haber sido personalmente muy morales, pero sus pinturas son aburridísimas. Así, la masonería ciertamente entró en parte de la música posterior de Mozart, notablemente la “Flauta Mágica”, pero la música se sostiene sobre sus propios pies, y ciertamente debe su belleza no a la guerra de la masonería contra Dios, sino a los padres católicos de Mozart y a su temprana educación en la Austria altamente católica de la emperatriz María Teresa.

Que, en segundo lugar, el maduro Mozart nunca completó otra obra mayor para la Iglesia es cierto en la medida en que la Misa en Do Menor y el Réquiem están inconclusos, pero ¡cuán a menudo se tocan esas dos obras, y con qué efecto religioso! Además, ¿hay alguna pieza musical tan a menudo tocada o cantada en iglesias y capillas católicas como el “Ave Verum Corpus” de Mozart? Y si distinguimos la música implícitamente de la explícitamente católica, ¿puede alguien negar que Mozart, como Shakespeare, es un tremendo portador de valores católicos, en el caso de Mozart los valores de armonía, orden, belleza y alegría para innumerables oyentes? ¿Y no son estos grandes artistas, implícitamente y por herencia católicos, una misericordia de Dios para que los post-católicos puedan disfrutar de los valores católicos sin darse cuenta? Si los pos-católicos se dieran cuenta de ello, ¿no repudiarían esos valores como los liberales que actualmente “de-construyen” a Shakespeare en las supuestas “universidades”, y sin duda a Mozart en los “conservatorios de música”? De hecho, ¿pueden los actores y músicos liberales de hoy en día acercarse al corazón de Shakespeare o Mozart? ¿Qué dice esto de ese corazón? ¡No liberal!

Y en tercer lugar, el hecho de que algunas óperas de Mozart sean en parte tan desenfadadas que hayan provocado el desprecio de Beethoven – “Nunca podría yo escribir óperas tan frívolas”, dijo – deja fuera de la vista la parte seria de las mismas óperas. Junto a los coqueteos de Zerlina están las llamas de la condenación de Don Giovanni; junto a las aventuras amorosas del Conde está su sincera disculpa a su sufrida Condesa; junto al Seraglio está el resplandor del perdón. La vida real en un mundo caído es a la vez cómica y seria. Vea cómo al principio de “Don Giovanni”, Mozart combina musicalmente el duelo y la muerte de un duelista con el pánico burbujeante del criado-conejo de Don Giovanni, Leporello. Seguramente Mozart, como Shakespeare, “veía la vida con firmeza y la veía completa”, como decía Matthew Arnold de Sófocles.

Sin embargo, un lado de Mozart sigue siendo el de un niño malcriado (cf. la película “Amadeus”), y es parte integrante de una cristiandad ya decadente a finales del siglo XVIII. Pero cuando se compara con la caída de la música desde entonces, ¿no es su música casi angélica, sin que esté tan alejada de nuestros tiempos que pueda parecer inaccesible? Cualquier hombre daña su alma acostumbrándose a escuchar música que es basura, con poco o ningún valor intrínseco de melodía, armonía o ritmo. No dañará normalmente su alma acostumbrándose a Mozart, al contrario.

Kyrie eleison.

Mozart en Broadstairs

Mozart en Broadstairs on enero 27, 2018

Entre las 18:00 hrs. de la tarde del viernes 23 de febrero y la mediodía del domingo 25 de febrero, se llevará a cabo en la Casa Reina de los Mártires en Broadstairs, un modesto fin de semana musical presentando exclusivamente música del famoso compositor austriaco de finales del siglo XVIII, Wolfgang Amadeus Mozart (1756–1791). ¿Por qué música, cuando el mismo tiempo y esfuerzo pueden utilizarse en algo más directamente religioso? ¿Y por qué Mozart en particular?

¿Por qué música? Porque la música es un don de Dios al mundo que Él creó, una expresión de la armonía en el centro de Su universo, al cual responden todos los miembros vivos de ese universo, no solo ángeles y seres humanos, sino incluso animales y plantas a su manera. En cuanto a las plantas, investigadores de Colorado en EUA, construyeron cuatro cajas con idéntica luz, aire, humedad, suelo y plantas en las cuatro, y hicieron sonar en tres de ellas canto gregoriano, música clásica o Rock, mientras que la cuarta fue dejada en silencio. Con el Rock la planta creció pero se marchitó, con el canto floreció, con la música clásica y el silencio el resultado estuvo en medio. En cuanto a los animales, muchos vaqueros ponen en sus establos, a la hora de ordeñar, música tranquila para aumentar la producción de leche, tal como en los supermercados se pone música tranquila para incrementar las compras de los consumidores humanos. ¿Sorprendente? Es Dios quien nos creó y no nosotros mismos (Sal. IC, 3), nosotros somos Sus creaturas con la parte armoniosa que Él diseñó para que desempeñáramos en Su universo como un todo.

Para los seres humanos, la música es el lenguaje supremo dado por Dios para acceder a esa armonía de Dios, aunque, como Brahms, uno no crea en Dios. Por lo tanto, la música es natural para los seres humanos y tiene una enorme influencia moral sobre ellos, para bien o para mal. Mientras la Madre Iglesia recurre al canto y a la polifonía para elevar las almas hacia el Cielo, el Diablo usa el rock y todo tipo de música moderna para arrojar almas al Infierno. “Dime cuál es tu música y te diré quién eres”, dice el dicho. Casi todo hombre tiene algo de música en él, y ¡ay de él si no la tiene! – dice Shakespeare (Mercador de Venecia, V, 1) –

“El hombre que no tiene música en sí

Es apto para traiciones, estratagemas y malignidades . . .

No os fieis jamás de un hombre así. Escuchad la música”.

Se podría decir que quien no tiene música en sí, no es confiable porque no está en sintonía con Dios.

Y el mundo moderno no está en sintonía con Dios, lo que corresponde al ruido espantoso que tan a menudo pasa hoy en día por música, y que la gente ama, porque la música es tan natural para el hombre y penetra tan profundamente en su alma. Y este feo ruido es lo que hay en el alma de incontables personas a nuestro alrededor, y a través de ellas sólo puede influir en nosotros y alejarnos de Dios, si lo permitimos.

La cuestión es religiosa después de todo. Cualquier cosa profundamente humana tiene que ver con Dios, y la música es ciertamente profundamente humana.

Por otra parte Mozart pertenecía a un mundo mucho más sano que el nuestro, y su música corresponde a un momento especial de armonía y equilibrio entre el viejo orden y la emotividad moderna. Mozart es el músico de los músicos. Estos son algunos de los testimonios de músicos famosos – Tchaikovsky dijo: “Encuentro consuelo y descanso en la música de Mozart. En ella expresa la alegría de vivir que formaba parte de su temperamento sano y saludable”. Schubert dijo:”¡Qué imagen de un mundo mejor nos has dado, oh Mozart!”. Gounod dijo: “Mozart, el cielo pródigo te dio todo, gracia y fuerza, abundancia y moderación, equilibrio perfecto”. Brahms dijo: “Es un verdadero placer ver música tan brillante y espontánea expresada con la facilidad y gracia correspondientes”.

Mozart escribió todo tipo de música, pero sobresalen sus óperas y conciertos de piano. En Broadstairs no podemos manejar las óperas, pero John Sullivan que tocó en 42 horas la mitad de las sonatas de piano de Beethoven aquí en 2016 puede fácilmente manejar una hazaña similar con los conciertos de piano y las sonatas de Mozart. Háganos saber si usted planea venir, para que podamos tener una idea del número. No hay boletos que comprar. ¡Mozart no tiene precio!

Kyrie eleison.

Color, Poesía…

Color, Poesía… on enero 21, 2017

“Ya no se puede más vivir de política, de balances y de crucigramas. No se puede seguir viviendo sin poesía, sin color, sin amor” – palabras de Antoine de Saint Exupéry (1900–1944), aristócrata francés, aviador y escritor, no católico pero debatiendo en su alma con el materialismo del siglo 20. Él dijo de sí mismo: “Soy un hombre rastrillando las cenizas, un hombre luchando por encontrar las brasas de la vida en el fondo de una chimenea”. Y describiendo en su memoria filosófica Tierra de los Hombres (1939) una escena de trabajadores y sus familias apiñados en un tren nocturno de París a Varsovia, escribió que estaba atormentado no por su desolada condición, sino por “ver en cada uno de estos hombres, un poco, a Mozart asesinado”.

Estas citas vienen a la mente después de una visita el año pasado a la Bertramka, una villa situada fuera del centro de Praga en República Checa, y dada a conocer a finales del siglo 18 por las visitas del famoso compositor Wolfgang Amadeus Mozart. En ese entonces se llegaba desde la ciudad por una caminata de media hora por caminos rurales y una vereda revestida de castaños hasta el pórtico delantero, accediéndose a un jardín inclinado cubierto de flores y árboles frutales. Hoy el sombreado sendero ha dado paso a un enorme centro de compras y negocios a lo largo de una calle cargada de tráfico, atendiendo sólo a los semáforos. El pórtico aún está allí, pero el jardín inclinado se ha vuelto agreste, con una solitaria estatua del gran músico y con la mesa de piedra donde se cree terminó de componer su mundialmente famosa ópera Don Giovanni. Poco después dirigió su primera presentación en la ópera de la ciudad, todavía en uso. En cuanto a las dos habitaciones ocupadas en la Bertramka por Mozart, éstas han sido preservadas fielmente, pero la una vez hermosa colección de piezas de Mozart ya no estaba allí este octubre. La Bertramka todavía tiene atmósfera, pero mucho allí sólo susurra “Mozart asesinado”.

Todavía en el siglo 18 Praga había sido muy amable con él. En 1786, a diferencia de Viena, dio una acogida entusiasta a la igualmente popular y famosa ópera Las Bodas de Fígaro, como lo hizo el año siguiente con Don Giovanni. Y cuando Mozart murió en 1791, la ciudad de casa, Viena, le dio solamente una sepultura de hombre pobre, mientras que Praga le dio honores con una espléndida Misa de Réquiem a la que asistieron miles de personas e interpretada por un centenar de músicos que se negaron a recibir pago. Fueron los Emperadores y nobles católicos quienes, para restaurar la Bohemia católica después de 30 años de guerra religiosa (1618–1648), establecieron la educación musical generalizada para que la juventud Bohemia pudiera tocar en las ceremonias religiosas. Fue esta educación católica que generó en Praga un público capaz de amar de inmediato a Mozart y su música.

¿Puede decirse lo mismo de los católicos hoy en día, o nosotros somos también “asesinos de Mozart? Para Saint Exupéry, Mozart era de alguna manera lo opuesto al materialismo. ¿Pero cuántos Tradicionalistas hoy se aburren en la Misa cantada, y no pueden esperar para regresar a sus balances y crucigramas? Por desgracia, ¿no se sienten casi avergonzados muchos de nuestros muchachos de saber cantar? Y en cuanto a nuestras muchachas, ¡santo cielo! ¿No prefieren muchísimas de ellas ser astronautas o estrellas de voleibol en lugar de saber cómo tocar un instrumento musical que las ayudará a civilizar a sus maridos, humanizar a sus hijos y poner armonía en su casa? Un proverbio alemán dice que el hombre hace la cultura pero la mujer la transmite. ¿No es suicida para una sociedad no promover en sus niñas la verdadera “cultura, poesía y amor” que penetrarán profundamente en sus futuras familias y a través de sus familias en la sociedad?

En cuanto a Mozart, ciertamente que él no es la cumbre de la música espiritual occidental, y más tarde en su vida se unió a la Masonería que entonces estaba de moda en Viena. Pero es mucho más espiritual que el mundo de los centros comerciales y semáforos, como bien lo vio Saint Exupéry, y ciertamente que no fueron los masones, sino sus padres profundamente católicos que formaron en el niño y el joven el corazón católico de donde brotó toda la espiritualidad de la música del adulto. Sin duda que la pieza más frecuentemente ejecutada de toda la música de Mozart, compuesta poco antes de su muerte, es su Ave Verum Corpus, por ser tan frecuentemente interpretado en Misa. Y su profundamente católico Réquiem que aún estaba componiendo en su lecho de muerte. Que su alma descanse en paz.

Kyrie eleison.

Cultura: ¡Alerta!

Cultura: ¡Alerta! on diciembre 29, 2012

Mientras los dirigentes de la Fraternidad San Pío X parecen tambalearse, los católicos que aman la Fraternidad por haber recibido tanto de ella desde hace muchos años, podrían estar tentados de pensar que, en tanto que fieles, prácticamente no pueden hacer nada para cambiar la situación. En este caso estarían equivocados. Quieran ellos leer estas reflexiones de uno de mis amigos y puedan, leyendo entre las líneas, concluir que si Dios no socorre a la Fraternidad para ellos, como por supuesto El podría hacerlo, entonces esto depende de ellos, por lo menos en parte. He aquí la carta adaptada de mi amigo:—

“Un acuerdo práctico sería desastroso para la causa de la Tradición Católica. Basta solamente a uno mirar lo que les ocurrió a los Redentoristas Tradicionales en Escocia . . .Las dos Misas no pueden cohabitar. Una siempre expulsará a la otra . . .Hace poco, en una Nueva Misa a la cual asistí, toda la Iglesia fue perturbada por la gente que conversaba y aplaudía sin cesar . . .Los dos lados se encuentran sencillamente tan alejados el uno del otro que un acuerdo no puede funcionar. Ningún acuerdo es posible entre los espíritus que están a favor de la modernidad y los que están a favor de la Tradición.

“Además, existe la profunda revolución que ha arrollado a la civilización moderna, incluyendo al movimiento Tradicional, y que ha pasado inadvertida por gran parte de los dirigentes de la Tradición . . .La tecnología electrónica ha forjado una revolución cultural en nuestras vidas, particularmente las de las generaciones mas jóvenes. Si ella no está controlada debidamente, ella debilitará seguramente la Fe porque puede involucrar la totalidad de la vida de la gente. Los jóvenes fácilmente se dejan apresar por ella. Están pegados a ella durante todo el día. Las personas demasiado inmersas en ella se tornan disfuncionales, incapaces de levantarse en la mañana, de mantener una conversación en vivo, o de cumplir con un trabajo.

“Ahora bien, si un equipo deportivo no es amonestado por su entrenador, su brío empezará a declinar. Si los católicos no son amonestados en cuanto a conductas culturales como la música, la manera de vestir de las mujeres, la televisión, sus patrones culturales empezarán a caer, lo que tendrá profundas implicaciones para su fe. Los padres Tradicionalistas han sido abandonados a sí mismos para luchar con sus familias a fin de apartarlas de la mundanidad de la sociedad moderna fuera de sus hogares, porque los dirigentes de la Fraternidad o bien no han percibido esta revolución cultural o bien no le han prestado la atención que se merece. He mantenido muchas largas conversaciones con familias Tradicionalistas que están preocupadas respecto al rumbo que el movimiento Tradicional está tomando. Los movimientos religiosos deben tomar posición sobre las conductas culturales si es que están destinados a fructificar. La Tradición salía reforzada cuando ella tomaba una posición firme sobre la televisión. Pero si no se resiste sobre los problemas culturales, la resistencia sobre los temas doctrinales empieza pronto a debilitarse.

“El último Capítulo de la FSPX puede haber salvado a la organización del naufragio por el momento, pero no por eso estoy muy tranquilo. Se preocupó mucho por definir los parámetros de cualesquiera futuras discusiones con Roma en vistas a un acuerdo. Sin embargo Roma permanece básicamente sin cambio desde 1988. En mi opinión, la Fraternidad necesita recobrar el papel profético que ejercía cuando el Arzobispo Lefebvre estaba aún con vida. El movimiento Tradicional tiene que denunciar con firmeza al modernismo y al liberalismo que están llevando a la Iglesia a su destrucción. Estas denuncias fueron últimamente reducidas al silencio. Es posible que muchos sacerdotes Tradicionalistas estén distraídos pensando en las facilidades que, suponen ellos, les podría traer un acuerdo con Roma.

Ahora les toca a ustedes, estimados lectores. Alejen de sus hogares la música basura y sin valor. Desháganse de los televisores. Reduzcan la electrónica al mínimo. Madres, usen polleras tanto como puedan, es decir la mayor parte del tiempo. Sino, no os quejéis si Dios no viene a socorrer a la Fraternidad. El no fuerza a nadie a recibir Sus dones: “Ayúdate que Yo te ayudaré.” Bendito sea Su Nombre por siempre.

Kyrie eleison.

Enfrentando al Caos

Enfrentando al Caos on febrero 18, 2012

Perspicaces lectores de estos “Comentarios” pueden haber observado una aparente contradicción. Por una parte, los “Comentarios” han condenado a menudo cualquier modernidad en las artes (por ejemplo EC 114, 120, 144, 157, etc.). Por otra parte, la semana pasada el poeta anglo-americano T.S.Eliot fue llamado un archi-modernista y alabado por haber lanzado un nuevo estilo de poesía mas acorde con los tiempos modernos, caóticos por cierto.

Como los “Comentarios” lo han señalado muchas veces, la modernidad en las artes se caracteriza por una fealdad y una falta de armonía porque el hombre moderno elige cada vez más vivir sin o en contra de Dios que ha llenado su creación con orden y hermosura. Pero esta hermosura y orden están ahora tan enterrados bajo las pompas y obras del hombre sin Dios que es fácil para los artistas creer que esas cualidades ya han dejado de existir. Si entonces su arte debe corresponder a lo que perciben de su entorno y sociedad, únicamente un artista moderno excepcional podrá transmitir algo del orden divino subyacente bajo la superficie desordenada de la vida moderna. Al contrario la mayoría de los artistas modernos han renunciado al orden y, como sus clientes, se revuelcan en el desorden.

Pero Eliot nació y fue educado a finales del siglo 19 cuando la sociedad mantenía todavía un orden relativo, y recibió en Estados Unidos una buena educación clásica en la época en que sólo algunos pocos maleantes en secreto soñaban con reemplazar la educación por el entrenamiento en materias inhumanas. Así Eliot pudo haber tenido en su juventud poco o ningún acceso a la verdadera religión, pero fue bien instruido por los clásicos de la música y de la literatura occidental que esta religión estaba produciendo desde la Edad Media. Sintiendo y buscando en ellos el orden que faltaba alrededor de él, Eliot se hizo capaz de captar el profundo desorden del naciente siglo 20, un desorden que no hizo más que explotar en la primera guerra mundial (1914–1918). De allí, La Tierra Baldía de 1922.

Pero en este poema Eliot está lejos de revolcarse en el desorden. Al contrario, claramente él lo odia, mostrando cuán vacío se encuentra de calor y de valor humanos. Así, puede ser que en “La Tierra Baldía” se encuentren pocas trazas de la religión occidental, pero sí termina con fragmentos de la religión oriental, y como dice Scruton, Eliot estaba seguramente sondeando la dimensión religiosa del problema. De hecho, pocos años después Eliot casi se volvió Católico, pero fue desanimado por la condenación de la “Acción Francesa” por parte de Pío XI en 1926, la cual le pareció a él favorecer el desorden mas que frenarlo. Así, lleno de gratitud para una Inglaterra que le había dado tanto del orden tradicional, él optó por una solución menos que completa , una combinación de anglicanismo y cultura profunda con un Rosario siempre en su bolsillo. Sin embargo Dios escribe derecho en líneas torcidas. ¿Cuántas almas en busca de orden se alejarían de Shakespeare o Eliot si pensaran que cualquiera de los dos, por ser totalmente Católicos, no tienen más que respuestas pre-fabricadas que no corresponden a la vida real?

Eso es triste, pero así es. Ahora bien, las almas pueden muy bien estar engañándose de una manera o de otra si se alejan de los autores o artistas católicos con el pretexto de que ellos no encaran la vida real, pero corresponde a los Católicos no darles tal excusa. Demos nosotros los Católicos el ejemplo de no conformarnos con soluciones artificiales para los problemas modernos ya que éstas serán necesariamente falsas. No somos ángeles; somos criaturas terrenales invitadas al Cielo siempre y cuando nos decidamos a llevar nuestra Cruz moderna siguiendo a Nuestro Señor Jesucristo. ¡Solamente tales seguidores pueden reconstruir la Iglesia y el mundo!

Kyrie eleison.

Paganos Virtuosos

Paganos Virtuosos on octubre 22, 2011

Al leer (EC 221) como la música de Brahms es prueba de cierta grandeza de alma, un joven lector brasileño pregunta si la mecha que aún humea en él, no humea mejor que en un Católico tibio (ver Mt. XII,20). El contraste apunta a resaltar la virtud del pagano y a cuestionar la virtud de los Católicos “tibios, perezosos.” Por supuesto la virtud pagana es digna de alabanza y la tibieza Católica de censura, pero eso genera una pregunta mayor: ¿Hasta que punto es importante ser un Católico creyente? ¿Cuán importante es la virtud de la fe? La respuesta debe quedar en pie, es tan importante como larga es la eternidad.

Que la virtud de fe sea de supremo valor resulta evidente a partir de los Evangelios. ¿Cuán a menudo Nuestro Señor despues de haber realizado un milagro de curación física o espiritual dice al beneficiado que su fe es la que obtuvo para ella el milagro, como es el caso de María Magdalena (Lc.VII,50). Sin embargo la Escritura deja igualmente claro que esta meritoria fe es algo mas profundo que el simple conocimiento explícito de la religión. Por ejemplo, los centuriones Romanos pueden haber conocido poco o nada de la verdadera religión en sus días, el Antiguo Testamento, sin embargo de uno de ellos Nuestro Señor dice no haber encontrado una fe tan grande en Israel (Mt.VIII,10), otro de ellos reconoce como al Hijo de Dios al Jesús crucificado del cual los expertos en religión no hicieron mas que burlarse (Mt.XXVII,41), mientras un tercero, Cornelio, marcó el sendero para todos los gentiles que entrarán en la verdadera Iglesia (Hech.X,XI). ¿Qué tenían estos centuriones paganos que los sacerdotes, escribas y ancianos no tenían, o habían perdido?

Desde el principio hasta el fin de la vida de todos los hombres en la tierra, tanto los paganos como los no paganos, están confrontados constantemente a una variedad de cosas buenas, todas provenientes en última instancia de Dios, y de cosas malas provenientes de la maldad de los hombres. Pero Dios mismo es invisible mientras que los hombres malos son demasiado visibles, de manera que es demasiado fácil no creer en la bondad o aún en la existencia de Dios. Con todo, los hombres de recto corazón creerán en la bondad de la vida a la vez que desestimarán relativamente, pèro no absolutamente, al mal, mientras los hombres de mal corazón desestimarán lo bueno que está alrededor de ellos. Ahora bien, los dos pueden no tener alguno conocimiento explícito de la religión, pero mientras que los hombres de recto corazón, como los centuriones, sujetarán ese conocimiento tan pronto como cruza su camino, los de mal corazón, al contrario, lo despreciarán, mas o menos. Asi, los inocentes Andrés y Juan se sujetaron inmediatamente al Mesías (Jn.I,37–40), mientras que el letrado Gamaliel necesitó mas tiempo y argumentos (Hech.V,34–39). Digamos pues que en el corazón de la virtud explícita y esclarecida de fe, se encuentra una implícita confianza en la bondad de la vida y en algún Ser detrás de ella, una confianza que puede ser socavada por una doctrina errónea o quebrantada, por ejemplo, por el escándalo.

Si volvemos al caso de Brahms, la pregunta entonces viene a ser, ¿Tenía al menos esta confianza implícita en la bondad de la vida y en el Ser detrás de ella? Con seguridad la respuesta es no, porque pasó la segunda mitad de su vida en lo que era en ese entonces la ciudad capital de la música, la Católica Viena. Allí la belleza de su música debe haber llevado a muchos de sus amigos y hasta a sacerdotes a incitarlo a la realización explícita de esta belleza que existe en la profesión y en la práctica de la religión de Viena, pero él debe haber rechazado todos estos tales llamados. Por consiguiente parecería muy posible que no haya salvado su alma . . .Sólo Dios lo sabe.

De todas maneras agradecemos a Dios por su música. Como dijo maravillosamente San Agustín, “Toda verdad nos pertenece a nosotros Católicos.” ¡Equivalentemente toda belleza, aún la creada por paganos!

Kyrie eleison.,