Tradición

¡Manténganse Despiertos!

¡Manténganse Despiertos! on abril 16, 2011

En una situación mundial tan seria que inclusive se escuchan rumores de que el reciente desastre de Japón, con sus aproximadamente 27,000 muertos en tiempo de paz, no fue un acto de Dios sino un acto del hombre (ver HAARP tsunami en el Internet), ¿qué puede un Católico hacer para salvar su alma? A decir verdad no hay mucho que él pueda hacer para el mundo, pero lo menos que debe hacer para si mismo es velar, es decir mantenerse despierto.

Es Nuestro Señor en el Jardín de Getsemaní, quien pone el velar, el mantener nuestros ojos abiertos y no adormecernos, aún antes de la oración (Mateo XXVI, 41). La razón es obvia. Si, a ejemplo de Pedro, Santiago y Juan, no me mantengo alerta (Mateo XXVI, 43), cesaré de rezar, tal vez como en el caso de ellos, cuando Nuestro Señor más lo necesita. ¿Cuántos Católicos en los 1950’s y 1960’s, especialmente el clero, no estaban observando los signos de los tiempos en la Iglesia y en el mundo, y por lo mismo fueron sorprendidos completamente por la apostasía de Vaticano II? He aquí la razón por la cual los “Comentarios Eleison,” como solían hacer las “Cartas del Rector,” constantemente vuelven a la economía y a la política, para hacer que los Católicos despierten y se den cuenta de lo que es su religión con sus exigencias, superadas por mucho por sus promesas (I Corintios II, 9).

Por lo tanto un experto del Wall Street (ver jsmineset.com, 30 de Marzo, 2011) puede decir, “El sistema financiero está tan dañado que ya no puede repararse. Además, no existe deseo alguno de repararlo porque los hombres inteligentes saben que es imposible. Estamos en el mundo que ha sido creado por haber desechado al Banco Lehman. No es “Un Mundo Feliz” . . .” Jim Sinclair dice que no importa cuánto “dinero de broma,” como uno puedo llamarlo, los bancos centrales se empeñan en emitir . . . “El daño está hecho y no existe solución . . . favor de hacerse materialmente auto-suficientes” (dice él, subrayado por mi).

Todavía, aún los Católicos Tradicionalistas están siendo tentados para cabecear, hasta quedarse dormidos. Aquí dos recientes testimonios. El primero es de un maestro en una escuela Tradicional:— “Me siento tremendamente solo en la batalla, no la batalla con los enemigos externos del mundo, sino aquella dentro de la Fraternidad de San Pío X. Esta batalla interna está siendo librada tan sutilmente que nadie parece estar consciente de ella. Es lo mismo que sucedió en la Iglesia oficial en los años 1960’s, el mismo cambio gradual y lento en el comportamiento.”

El segundo viene de un observador dentro de la escena Católica Tradicional en los EUA de hoy:— “Me parece que la militancia Católica está en decadencia. Veo muchos Católicos Tradicionalistas, especialmente padres de familia, aceptando las corrientes del mundo. La lucha ya no es importante para ellos. Están felices de poder tener su hermosa Misa los domingos, pero los Lunes mandan a sus hijos a escuelas públicas. Cada Noviembre salen para votar por el menor de los dos demonios, ven Fox News (¿conservador?) y esperan del Partido Republicano (¿conservador?) la solución a todos los problemas del mundo actual. En mi humilde opinión esta falta de militancia está penetrando más y más en el mundo Católico Tradicional. ¿Estamos nosotros (los laicos) recreando el mismo conjunto de circunstancias que nos llevó al Vaticano II? ¿Es el Católico tibio hoy en día la predominante mayoría en el movimiento Tradicional? Temo que la respuesta a ambas preguntas pueda ser, sí.”

¿Pues no es mucho más fácil renunciar a nadar en contra de la corriente actual, mucho más acogedor el abandonarse en los brazos del Sueño? Lo menos que puede uno hacer por sí mismo es deshacerse del televisor.

Kyrie eleison.

Nuevaiglesia, Nuevosbeatos

Nuevaiglesia, Nuevosbeatos on abril 9, 2011

El 1° de Mayo, a escasas semanas, Juan Pablo II será declarado “ Beato” por Benedicto XVI en medio de una gran celebración en La Plaza de San Pedro en Roma. Pero los Católicos que se aferran a la Tradición saben que Juan Pablo II, mientras fue un gran promotor de la Iglesia Conciliar, fue un destructor efectivo de la Iglesia Católica. ¿Entonces cómo puede ser proclamado “Beato,” el último paso antes de ser canonizado, cuando las canonizaciones de la Iglesia son infalibles? La respuesta rápida es que Juan Pablo II no será beatificado como un Beato católico a través de una beatificación católica en la Iglesia católica, sino como un “Nuevobeato” a través de un “Nuevabeatificación” de la “Nueviglesia.” Y los “Nuevoprelados,” primeros en proclamar la novedad por lo que hacen, son los últimos en reclamar infalibilidad.

Ilustremos la naturaleza de la Nueviglesia a través de una comparación obtenida de la vida moderna. La gasolina pura (bencina, nafta) huele, sabe y actúa como la gasolina. Esta puede hacer que un auto funcione. El agua pura huele, sabe y actúa como agua. El agua no puede hacer que un auto funcione. La gasolina mezclada con tan solo un poco de agua aún puede oler y saber a gasolina, pero ya no actúa mas como gasolina – – no se puede usar para que funcione un auto. El agua le ha quitado su capacidad de combustión.

La gasolina pura se compara con el catolicismo puro – ¡altamente combustible! El agua pura en nuestra comparación es como el humanismo secular puro, lo que será la Religión global, sin rastro alguno de Catolicismo en ella. Ahora el Catolicismo y el humanismo secular se mezclaron en el Concilio Vaticano Segundo y en sus 16 documentos. Así es que el Conciliarismo, o Nuevo Catolicismo, puede aún oler y saber a Catolicismo, suficiente como para hacer que los “buenos Católicos” esperen que las beatificaciones Conciliares se pongan en la vía de la infalibilidad, así como hacían las beatificaciones en la Iglesia pre-Conciliar, pero en realidad una pequeña mezcla de humanismo secular fue suficiente para que el Catolicismo dejara de funcionar, así como no se necesita de mucha agua para que la gasolina ya no haga combustión.

Así es que las nuevas beatificaciones para los olfatos Católicos desprevenidos pueden saber y oler a beatificaciones Católicas, pero cuando se examinan más de cerca es claro que las nuevas beatificaciones no son para nada la misma realidad. Un ejemplo famoso: una beatificación Católica anteriormente requería de dos milagros distintos, mientras que la Nuevabeatificación requiere de uno solo. Y las reglas de la Nuevabeatificación están significativamente relajadas en algunas otras formas también. Por lo tanto ningún Católico debe esperar otra cosa diferente que un Nuevobeato que emerja de una Nuevabeatificación. Juan Pablo II fue de hecho un “Beato” del Concilio.

Lo que engaña a los Católicos son los elementos del Catolicismo que aún permanecen en la Iglesia Conciliar. Pero así como el Vaticano II fue diseñado para reemplazar el Catolicismo (gasolina pura) con el Conciliarismo (gasolina-agua), así el Conciliarismo está diseñado para dar paso – digámoslo así – a la Religión Global (agua pura). La procesión va de Dios hacia el Nuevodios, y del Nuevodios al Nondios. Hoy en día aún tenemos a la Nueva Roma empujando al Nuevodios del Vaticano II con Nuevobeatos que le correspondan, pero no pasará mucho tiempo para que verdaderos criminales sean los “Beatos” del Nondios.

Sin embargo, el verdadero Dios no dejará que aquellas ovejas que no quieren ser engañadas lo sean. Ni abandonará una sola alma que no lo haya abandonado a Él antes, dice San Agustín. ¡Cita maravillosa!

Kyrie eleison.

Discusiones Futuras

Discusiones Futuras on marzo 5, 2011

Para la tranquilidad de algunos y la decepción de otros, parecería que las Discusiones doctrinales que se llevaron a cabo durante el último año y medio entre teólogos de Roma y representantes de la Sociedad de San Pío X llegarán después de todo a su fin esta primavera, debido a que los temas principales a discutir ya se habrán cubierto para entonces, sin una verdadera ventana de posibilidad para algún acuerdo. A esta conclusión parecería tentativamente estarse llegando, de acuerdo a los comentarios que el Superior General de la Sociedad, Mons. Fellay, pronunció en una entrevista que concedió el 2 de Febrero.

Ahora bien, para aquellos que se sienten decepcionados, tengan la certeza de que existen Romanos y sacerdotes de la FSSPX que difícilmente dejarán a un lado sus esfuerzos para construir un puente entre los clérigos del Vaticano II y los de la Tradición Católica. Pero como quiera que sea esta lucha para unir a todos los Católicos de buena fe, esfuerzos que van y vienen ayer, hoy y mañana, las palabras de Nuestro Señor son un anclaje: “El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán” (Mateo, XXIV, 35). Porque en su vida se moldea la vida de la Iglesia, y en su vida existió un ir y venir de luchas y sufrimientos humanos, culminando en la terrible crucifixión, más mientras sintió toda urgencia humana de evitar la voluntad de su Padre – “Padre, si es posible, que pase de mí este cáliz . . .” – aún su mente humana y su corazón estaban anclados en esa voluntad divina – “más no se haga mi voluntad, sino la tuya” (Mateo XXVI, 39).

Así es que la misma voluntad inmutable divina que dirigió y ancló la voluntad y mente humanas de Nuestro Señor, debe anclar también la vida de su Iglesia. Así es que los Papas, Concilios, Congregaciones religiosas y Fraternidades pueden ir y venir, pero para permanecer Católicas deben de someterse a esa voluntad divina a la que nuestro Señor se sujetó, y deben de decir exactamente las mismas verdades que Nuestro Señor transmitió de su Padre a su Iglesia. Como ninguna otra institución sobre la tierra, la Iglesia Católica está tan estrechamente construida alrededor de la Verdad que su supervivencia es proporcional a su fidelidad a esta Verdad. Debido a que la Iglesia Conciliar está poniendo los intereses humanos en el lugar de la Verdad divina, se está desintegrando, y cualquier Congregación Católica o Fraternidad que haga lo mismo, de igual manera se desintegrará.

Por lo tanto se puede deducir que cualquiera que sea fiel a la Verdad revelada en su totalidad se encuentra en efecto – no en principio, sino en la práctica – en el asiento de conductor de la Iglesia (Ver “Cartas del Rector,” Vol. IV, p. 164). Además, quien sea que tiene esa Verdad y pretende no ocupar el asiento del conductor sería el equivalente de lo que Nuestro Señor se habría llamado a sí mismo si hubiese renegado de su Padre: “un mentiroso” (Juan VIII, 55). Esto debido a que cualquier mensajero que reniegue de la divinidad de su mensaje divino no es amante verdadero de su prójimo, como él y los demás pueden gustarles pensar, pero tiene por su padre al padre de la mentira (Juan VIII, 44).

Existe una Verdad, aún si la mayoría de la gente pueda apenas reconocerla. El derecho y capacidad de los Romanos de gobernar la Iglesia depende de que sean fieles a esa Verdad. El derecho y capacidad de la FSSPX de hacer frente a los Romanos infieles depende de la fidelidad de la FSSPX a la misma Verdad. Por el momento la FSSPX ha sido fiel, así es que por ahora la FSSPX sobrevivirá, pero ¡ojalá Roma, regresando a la Verdad, hiciera que esta supervivencia sea innecesaria!

Kyrie eleison.

Película Excepcional

Película Excepcional on febrero 12, 2011

Es fácil ver cómo la película Francesa recientemente estrenada titulada “De Dioses y Hombres,” ganó el mayor premio en el prestigioso Festival de Cine de Cannes en Francia el año pasado. Esta recrea eventos reales de 1996, los últimos meses en la vida de un monasterio Cistercense en la Argelia post-colonial, en donde los últimos ocho monjes fueron finalmente sacados y matados por asesinos desconocidos. La película está bellamente dirigida, actuada y fotografiada. De interés particular para los Católicos familiarizados con la Tradición será la religión de la misma y – desde un punto de vista religioso – la política.

Tal vez lo más notable de todo es el verdadero sentido de religión de la película, dado que se representa la religión Conciliar. Doctrinalmente, existen por ejemplo momentos ecuménicos de excesivo respeto hacia el Corán. Litúrgicamente las palabras y la música entonadas en la sencilla pero noble iglesia del monasterio, compuestas por el hombre moderno, son subjetivas y sentimentales. Sin embargo las escenas que continuamente muestran a los monjes en oración son tan genuinamente religiosas que verdaderamente asombran en nuestra era secularizada. Es cuando uno dice, ¡he aquí la esencia de un monasterio!

¿Qué puede decir uno? En lo que respecta a la dirección y actuación de la película, así como los Británicos modernos pueden representar más convincentemente la era Victoriana por el simple hecho de que el Imperio Británico está suficientemente cerca en su historia para aún correr por sus venas, así los actores Franceses de esta película deben representar maravillosamente a los monjes porque el monacato Católico es una parte extremadamente importante de su herencia. Pero sobre todo, como Nuestro Señor dice (Mateo XV, 18,19), es lo que está en el corazón del hombre lo que importa. Mucho mejor que todo es el Tradicionalismo de corazón, pero esta película nos recuerda a los Tradicionalistas que el Conciliarismo de corazón puede todavía agradar a Dios mejor que la Tradición sin corazón.

La política representada en esta película es de particular interés en vísperas del actual levantamiento Islámico en varios países Árabes. Los monjes en la película, como sin duda sucedió en la vida real, están atrapados políticamente entre la espada y la pared. Por un lado sus vidas no-Islámicas están obviamente amenazadas por los rebeldes Islámicos que matan a cualquiera que se ponga en el camino de su conquista política de Argelia para el Islam. Por otro lado el gobierno Argelino post-colonial desconfía mucho de la ayuda de los monjes y su complicidad con los rebeldes al auxiliar a sus heridos con las obras de misericordia de la Iglesia, e invita a los monjes a dejar el país. Al día de hoy algunas personas piensan que fueron ejecutados por el gobierno Argelino. Dios sabe.

¿Qué puede decir uno? Ciertamente el Católicismo de corazón es mucho mejor que el Islamismo de corazón, que es una secta anti-cristiana, simplista y brutal. Pero si el corazón en el Catolicismo se agota, cómo lo logró el Vaticano II, como para que en la vida real, en cualquier parte del mundo, los monjes y sacerdotes Católicos sean culpables de dar ayuda no solamente médica sino también moral a los revolucionarios anti-católicos – de hecho, como el Arzobispo Lefebvre solía decir, ¡los sacerdotes modernistas se tornan en los peores revolucionarios! – ¿puede uno sorprenderse si cualquiera de los gobiernos establecidos se objeta a los sacerdotes Conciliares que socavan la ley y el orden? El Islam no sigue floreciendo sino porque la Iglesia Católica continúa cayendo.

¡El cuánto depende de aquellas pocas almas que aún perduran en la Tradición Católica!

Kyrie eleison.

Contaminación Liberal

Contaminación Liberal on febrero 5, 2011

Si el liberalismo en su sentido más amplio se define como la liberación del hombre de Dios (hacer referencia a los “Comentarios Eleison” de la semana pasada), entonces el Catolicismo liberal del siglo XIX que surgió de la Revolución Francesa (1789) fue en términos generales la liberación exitosa de Dios por la política, mientras el Modernismo liberal de principios del siglo XX podemos considerarlo como el intento fallido de liberar a la Iglesia Católica de Dios, intento frustrado por San Pío X. Sin embargo, ese intento tuvo éxito, medio siglo después, más allá de los sueños de los liberales, con el Concilio Vaticano Segundo. Enseguida les presento otro testimonio reciente que recibí de Italia, que muestra cómo el Tradicionalismo liberal trabaja actualmente para liberar la Tradición Católica de Dios (¡si tan solo tuviésemos la mitad de la perseverancia del Demonio!):—

“Después de que el Motu Proprio de Benedicto XVI desencadenó la Misa Tridentina en el 2007, una gran cantidad de Católicos se acercaron más a la Tradición, pero su calidad varió ampliamente. Como era inevitable, el aumento en número atrajo hacia la Tradición muchos Católicos que nunca habían estado convencidos de su importancia y cuya idea de la Tradición era aún básicamente subjetiva, lo que quiere decir que para esos Católicos, la Tradición es opcional y no obligatoria. En este sentido, aún si Benedicto de hecho dijo algunas cosas provechosas en su discurso clave del 22 de Diciembre del 2005, su efecto fue desastroso.

“La confianza en el Papa hizo entonces que cualquier pensamiento crítico acerca de la liturgia, catequesis o doctrina modernas, tomara un segundo lugar. El establecer distinciones o el aclarar la confusión lo hacía a uno extremadamente impopular. Sin embargo, el anuncio de Asís III le dio un fuerte golpe a este espectro amplio y blando de la Tradición, y los Católicos tuvieron que decidirse. Los contrastes salieron a la luz y las primeras divisiones se esbozaron.

“Benedicto XVI ha tenido éxito al infectar el potencial prometedor de jóvenes Católicos conectados o cercanos a la Tradición, y ha logrado crear divisiones. Mucho de ese potencial ahora está arruinado, aún cuando uno pudiese depositar la esperanza en Dios de que muchos otros jóvenes terminaran hablando y comportándose en una manera propiamente Católica. Entonces ¿cuántos Católicos abrazarán al fin, de todo corazón, la causa justa de la Iglesia? Tendremos que esperar a que la polvareda se disipe y a que los hombres de buena fe y vigor fresco hagan su aparición.

“Ser testigo de la Tradición requiere más que nunca antes de declaraciones firmes y claras. Vacilar causa solamente daño. Mientras tanto, sigamos luchando, subiendo el tono en donde sea necesario y abiertamente resaltando los males de la Nueva Iglesia Conciliar de Benedicto XVI. La opinión pública en Italia está muy lejos de preocuparse de los verdaderos problemas de la Iglesia. Los Católicos aquí, practicantes o no, han aprendido por siglos a creer que lo que el Papa dice es palabra del Evangelio. Son hijos de nuestra era.”

Seguramente este testimonio sugiere que la marginalización de Econe por la Iglesia oficial en 1975 y su rotunda condenación con las “excomuniones” de 1988, ayudaron a salvar a la Tradición Católica de la contaminación liberal. ¿Necesitará permitir el Señor Dios por esa misma razón otra división y marginalización como la de entonces? ¡Fervientemente esperamos que no!

Kyrie eleison.

Infección Tradicional

Infección Tradicional on enero 29, 2011

El liberalismo es una enfermedad increíble, capaz de pudrir los mejores corazones y mentes. Si lo definimos brevemente como la liberación del hombre de Dios, es tan viejo como el pecado, pero nunca antes ha sido tan profundo o generalizado o aparentemente normal, como lo es hoy en día. Ahora, la libertad religiosa está en el corazón del liberalismo – ¿qué sentido tiene ser libre de todo lo demás y de todos los demás si no soy libre de Dios? Así es que si Benedicto XVI se lamentaba hace tres semanas que la “libertad religiosa está amenazada en todo el mundo,” ciertamente está infectado. Tampoco se permitan los seguidores de la Tradición Católica estar confiados que ellos tienen inmunidad de esta enfermedad. Aquí un correo electrónico que recibí hace algunos días de un laico de Europa:—

“Por mucho tiempo, alrededor de 20 años, fui moldeado por el liberalismo. Es a través de la gracia Divina que sufrí una conversión con la Fraternidad de San Pío X. Para mi sorpresa he encontrado comportamiento liberal aún en las filas de la Tradición. La gente aún sigue diciendo que uno no debe exagerar lo mal que están las cosas hoy en día. Ya casi no se menciona a la Francmasonería como una enemiga de la Iglesia porque el hacerlo podría afectar los intereses personales, y así es que la gente continúa reaccionando como si, en general, el mundo aún se encontrase en orden.

“Algunos Tradicionalistas incluso recomiendan medicamentos psiquiátricos para sobrellevar el estrés que acompaña al Católico Tradicionalista, y si se está buscando la felicidad, dicen, deberías de ir con el médico para que te haga la vida más sencilla.

“La consecuencia de dicho comportamiento es un indiferentismo que es el semillero del liberalismo. De repente ya no es tan malo el asistir a la Misa del Novus Ordo, ni hacer causa común con los modernistas, ni el cambiar los principios de un día a otro, ni el dejar de mostrar nuestra fe en público, ni el estudiar en la universidad del Estado, ni el confiar en éste, ni el actuar bajo el supuesto de que, después de todo, todo lo que hace la gente no lo hace por maldad.

“Nuestro Señor tiene palabras duras para este tipo de indiferentismo: a los tibios Él “está por vomitarlos de su boca” (Rev. III, 16). Podría sonar paradójico, pero los más grandes enemigos de la Iglesia son los Católicos liberales. ¡Existe inclusive un Tradicionalismo liberal!!!” (fin de la cita del laico).

¿Entonces cuál es el antídoto para este veneno que nos amenaza a cada uno de nosotros? La gracia santificante, sin duda (Rom.VIII, 25), la cual puede librar a la mente de la confusión, y fortalecer la voluntad para hacer lo que la mente define como correcto. ¿Y cómo me aseguro de la gracia santificante? Eso es como preguntar ¿cómo puedo garantizar mi perseverancia final? La Iglesia nos enseña que nadie puede garantizarla, porque es un regalo – o el regalo – – de Dios. Pero lo que puedo hacer siempre es rezar el Santo Rosario, un promedio de cinco Misterios al día, mejor aún si fuese posible rezar los quince. Quien quiera que haga eso está haciendo lo que la Madre de Dios nos pide a todos nosotros, y ella posee poder materno virtualmente ilimitado sobre su Hijo, Nuestro Señor y Dios, Jesucristo.

Kyrie eleison.