Diez Mandamientos

Inminente Dictadura

Inminente Dictadura on noviembre 24, 2012

Un retrato notable de nuestro mundo contemporáneo apareció hace unos meses en el sitio de internet 321gold. El título es intimidatorio: “Decadencia, Descomposición, Denegación y Desesperación,” pero el contenido es ciertamente bien realista. Comenzando con una escena de la calle que puede encontrarse sin duda en todo el este de Estados Unidos, el autor concluye que dentro de unos 15 años una dictadura Orwelliana (cf. Rebelión en la Granja) descenderá sobre su país como resultado de efectos indeseados a partir de causas deseadas. Pero los Estados Unidos, ¿no son típicos de todo el mundo? ¿El mundo entero no está comprando la forma de vida norteamericana? “¡Que el comprador tenga cuidado!”

Este otoño en Wildwood, New Jersey, el autor observó calles llenas de una hueste de hombres y mujeres menores de 50 años, con extraordinario sobrepeso, paseándose por la ciudad en sillas motorizadas subsidiadas por el gobierno, visitando un sitio de comida rápida tras otro para hartarse con golosinas cargadas de azúcar que darían a sus vehiculitos último modelo más trabajo que nunca. ¿Y cuál es la graciosa descripción que el da a este fenómeno? – “El desafío del peso vencido por sillas motorizadas de movilidad superior.” Tal es hoy día el lenguaje del “políticamente correcto,” que busca disfrazar la realidad fea con palabras bellas, para fingir que todos los hombres son gentiles, bellos, iguales, jóvenes – ¡fuera los neo-Nazis!

El autor busca causas para este efecto tragicómico: ¿como pudo el pueblo americano que alguna vez ahorraba 12% de sus ingresos, haber sido persuadido al extremo de hacer explotar las estadísticas de obesidad, la curva saliéndose por fuera del gráfico, con una deuda abrumadora, una forma de vida saturada de comodidades, incapaces de ahorrar nada para ellos mismos, y agobiando a sus hijos y nietos con una insoportable carga de deuda y intereses? Ciertamente hay carencia de temperancia de parte de ellos, dice el autor, pero debe haber algo mas siniestro, alguna mente entre bambalinas detrás de tan insensata realidad. El dice que la masa de ciudadanos está siendo manipulada por un gobierno invisible que ha dominado las técnicas modernas de manipulación de masas.

Cita a un pionero de estos amos de los años 1920, Edward Bernays: “La manipulación consciente e inteligente de las masas es un elemento importante de la sociedad democrática . . .Vastos números de seres humanos deben cooperar de esta manera si es que van a vivir juntos como una sociedad que funcione sin enfrentamiento . . .Sea en política, negocios, conducta social o pensamiento ético, estamos dominados por un número relativamente pequeño de personas . . .que comprenden los procesos mentales y los patrones sociales de las masas.” Ellos son “el verdadero poder gobernante del país” y ellos “manejan los hilos que controlan la mente pública.” ¿Con que propósito? Para su propia riqueza y poder.

Son ellos los que han organizado la crisis económica y financiera para su propio beneficio. Ellos han “demolido la economía mundial . . .han cargado su deuda sin respaldo sobre los hombros de los contribuyentes y de las generaciones venideras, tirando bajo las ruedas del tren a los ancianos y a los ahorristas, robándoles US400 billones por año en intereses para enriquecerse a sí mismos con ganancias a nivel de burbuja y con bonificaciones fraudulentas.” Y cuando el tapón tenga que ponerse finalmente sobre esta forma de vida insostenible, cuando se derrumbe el castillo de naipes, entonces nuestros amos invisibles ya tienen preparado para nosotros un 1984Orwelliano, una “dictadura de lágrimas” con policía militarizada equipada con millones de balas, cámaras de vigilancia y aviones teledirigidos por todos lados, encarcelamientos sin cargos, y así sucesivamente. Con todo, dice el autor, es la propia culpa de los ciudadanos que han preferido la ignorancia voluntaria a la verdad, la enfermedad a la salud, las mentiras de los medios al pensamiento crítico, la seguridad a la libertad.

Una sola cosa falta en este admirable análisis: ¿Acaso nuestra elite gobernante haber podría tenido tanta rienda suelta, y/o nuestras masas haber vuelto tan tontas, si cualquiera de las dos hubiera retenido el mínimo sentido de un Dios que nos juzga a todos a la hora de la muerte, según Sus Diez Mandamientos? Por supuesto que no. Católicos, ¡despierten!

Kyrie eleison.

¿Religion de Estado? – I

¿Religion de Estado? – I on noviembre 26, 2011

¿Que papel tendría que jugar el Estado para proteger o promover la religión Católica? Cualquier Católico que sabe que el Catolicismo es la única verdadera religión del único verdadero Dios puede contestar únicamente que el Estado, siendo también una criatura de ese Dios, está obligado a servir lo mejor que pueda a Su única verdadera religión. Por otro lado cualquier liberal que cree que no le incumbe al Estado decir cual es la verdadera religión porque, por ejemplo, la religión es en todo caso asunto de cada individuo, contestará que el Estado debe proteger el derecho de todos sus ciudadanos a practicar la religión de su elección, o ninguna. Veamos los argumentos Católicos.

El hombre viene de Dios. Su naturaleza viene de Dios. El hombre es por naturaleza un ser social, por eso su carácter sociable viene de Dios. Pero el hombre en su totalidad, y no solamente una parte de él (Primer Mandamiento), debe rendir culto a Dios. La sociabilidad del hombre, pues, debe rendir culto a Dios. Pero el Estado no es otra cosa que la sociedad formada por la sociabilidad de todos sus ciudadanos que se reúnen juntos en su cuerpo político. Por consiguiente, el Estado debe rendir culto a Dios. Pero entre todos los diferentes cultos que necesariamente se contradicen el uno al otro (de otra manera no serían diferentes), todos pueden ser mas o menos falsos, pero no puede haber mas que uno que sea totalmente verdadero. De tal manera que si existe tal culto, totalmente verdadero y reconocible como tal, entonces ese es el culto que cada Estado, como Estado, le debe a Dios. Ahora bien, el Catolicismo es tal culto. Por consiguiente todo Estado, como Estado, debe rendir el culto Católico a Dios, ¡incluyendo aún la Inglaterra de hoy, o Israel o Arabia Saudita!

Pero una parte esencial del culto es rendirle a Dios el servicio del cual uno es capaz. ¿De qué servicio es capaz el Estado? ¡De un gran servicio! El hombre siendo social por naturaleza, su sociedad tiene una gran influencia sobre la manera como él siente, piensa y cree. Y las leyes de un Estado tienen una influencia decisiva para moldear la sociedad de sus ciudadanos. Por ejemplo, si el aborto o la pornografía están legalizados, muchos ciudadanos terminarán por pensar que tienen poco o nada de malo. Por consiguiente cada Estado tiene en principio el deber de proteger y promover por sus leyes la fe y la moral Católicas.

Así de claro está el principio. Pero, ¿será que ese principio significa que todos los no-Católicos deberían ser arriados por la policía y quemados en la hoguera? Claro que no, porque el objetivo del culto y del servicio a Dios es darle gloria y salvar las almas. Ahora bien, una acción desconsiderada por parte del Estado tendrá el efecto contrario, expresamente de desacreditar al Catolicismo y de alejar a las almas. Por ello la Iglesia enseña que incluso un Estado Católico tiene el derecho de abstenerse en la práctica de actuar contra una falsa religión cuando tal acción pueda causar un mal mayor o impedir un bien mayor. Pero el principio del deber de cada Estado de proteger la fe y la moral Católicas permanece intacto.

¿Significa eso imponer el Catolicismo a los ciudadanos? No, en absoluto, porque la creencia Católica no es algo que pueda ser forzado –”Nadie cree contra su voluntad” (San Agustín). Lo que sí significa es que en un Estado Católico la práctica pública de todas las religiones que no sean el Catolicismo puede o tendría que ser prohibida ahí donde tal acción puede o tendría que no ser contra-producente. Esta conclusión lógica fue denegada por el Vaticano II, porque aquel Concilio fue liberal. Sin embargo ha sido una práctica común en los Estados Católicos antes del Concilio, y habrá ayudado a salvar muchisimas almas.

Kyrie eleison.

Teorias de la Conspiracion

Teorias de la Conspiracion on noviembre 5, 2011

Después del reciente “Comentario Eleison” sobre el deicidio (EC 222), algunos lectores podrían esperar que el “Comentario Eleison” haga a menudo mención del papel que juegan los Judíos en los asuntos del mundo, pero corren el riesgo de desilusionarse. En 225 números que ya fueron publicados, no creo que los Judíos hayan sido mencionados como tales en mucho mas de media docena de números. Porque cualquiera que sea el problema que ellos pueden o no pueden representar, ciertamente no son el problema primario. El problema primario es el ateísmo del hombre moderno, eso es la preocupación central de “Comentario Eleison” y es, espero, lo que la mayoría de los lectores encuentran.

En lo que se refiere a las teorías de las conspiraciones como la de los Judíos conspirando para dominar el mundo, hay dos exageraciones entre las cuales es sabio pero no siempre fácil conservar el equilibrio justo. La mayoría de la gente sigue a los medios de comunicación sosteniendo que todas las teorías conspiracionistas son tonterías y que los únicos que creen en ellas son los “chiflados de la conspiración.” Por otra parte una pequeña minoría de gente, pero con convicciones fuertes, sostienen que todos los eventos del mundo deben ser explicados por una u otra conspiración, especialmente una conspiración Judía. La verdad esencial fue dicha de la mejor manera por un famoso escritor de la Iglesia hace 1800 años.

Tertuliano (160–220) dijo que la Fe Católica y el poder Judío son como los dos platillos de una balanza: en la medida que la Fe Católica sube, en la misma medida el poder Judío baja, y tanto como la Fe Católica baja, tanto el poder Judío sube. Pero la Fe está sobre el poder. Es por eso que el problema primario no son los Judíos, sino el aumento o la disminución de la Fe entre los hombres. Es por eso también que hay conspiraciones: juegan un papel importante y no deben ser simplemente despreciadas, pero el problema central son los hombres que se alejan del verdadero Dios en su única verdadera Iglesia. En breve – y este es el punto central – los Gentiles tienen solamente a si mismos para culparse si el poder Judío es hoy tan aplastante.

Por consiguiente los que empiecen a ver lo que Disraeli y Woodrow Wilson claramente insinuaron pero apenas pudieron decir abiertamente, a saber que existe un poder oscuro detrás del escenario que dirije los eventos del mundo, que ellos no pierdan su justa apreciación de la situación maldiciendo a los Illuminati, o a los Judíos, o a los Masones o a quienquiera que sea, pero que aprecien la sabiduría de las palabras de San Pío X: “Que todo hombre haga su deber, y todo irá bien.” Es porque nuestro primer deber es para con Dios, como el primer mandamiento lo indica, que si todos cumplimos con nuestro deber y hemos hecho nuestro retorno a Dios, será para El un sencillo juego de niños deshacer este actual poder de sus múltiples enemigos que El solo les dejó tener, al no intervenir desde el inicio para impedirlo.

Asi, antes que Nuestra Señora apareciera en Fátima en 1917, los enemigos de la Iglesia habían tomado el gobierno de Portugal completamente bajo su control, pero cuando prácticamente todo el pueblo Portugués rezó e hizo penitencia como Nuestra Señora lo había pedido, entonces Ella simplemente disolvió el poder de estos enemigos por una revolución incruenta. Portugal se volvió, en el ateo siglo XX con el Comunismo triunfando en todas partes, la vitrina de un Estado Católico.

Los enemigos mas inteligentes de Dios saben muy bien que le están sirviendo como un látigo para flagelar las espaldas de su pueblo descreído. Si sólo los amigos de Dios entendieran de que manera están flagelados por sus enemigos para ayudar a todas las almas a volverse hacia El y asi llegar al Cielo, entonces las teorías conspiracionistas se pondrían todas en su lugar: ni mas, ni menos importantes de lo que en realidad son.

Kyrie eleison.

Asisi-ismo – ¡No!

Asisi-ismo – ¡No! on enero 8, 2011

Algunas personas aún temen que la Fraternidad de San Pío X del Arzobispo Lefebvre esté en camino a un mal acuerdo con la Roma de Benedicto XVI, pero a través del Asisi-ismo del Papa entre otras cosas, uno puede decir que el mismo Benedicto XI está haciendo su mejor esfuerzo para prevenir tal ocurrencia.

Hace seis días argumentó en teoría que las “grandes religiones” del mundo pueden constituir “un factor importante de la paz y la unidad de la humanidad.”

Hace cinco anunció en práctica que en Octubre de este año irá como “peregrino” a Asís para conmemorar el 25 aniversario del Encuentro de Oración de las Religiones del Mundo, llevado a cabo en ese lugar por el Papa Juan Pablo II en 1986. Pero la teoría de todas “las grandes religiones del mundo” contribuyendo a la paz mundial fue rechazada por completo por el Arzobispo Lefebvre, y condenó la práctica del Encuentro de Oración de 1986 en Asís como una violación flagrante del Primer Mandamiento que, viniendo del Vicario de Cristo, constituía un escándalo sin precedentes en toda la historia de la Iglesia. Únicamente el temor de que un exceso de repetición pudiese ser contraproducente lo habría posiblemente detenido de castigar esta última locura del Asisi-ismo.

Sin embargo, el Arzobispo reconoció que en aquel momento muy pocos Católicos comprendieron la enormidad del escándalo. Esto se debe a que el mundo moderno en su totalidad marginaliza a Dios, deja entre paréntesis la divinidad de Nuestro Señor Jesucristo, hace a la religión una cuestión de libre elección y convierte la Tradición Católica en una simple cuestión de sensibilidad o sentimentalismo. Aún infectando a los Papas, esta manera de pensar se ha vuelto tan normal alrededor de nosotros que todos estamos amenazados en nuestra fe. Volvamos a algunos fundamentos:

Todo ser requiere una Primera Causa. Esa Causa, para ser la Primera, debe ser el Ser mismo, y debe ser un Ser completamente perfecto, porque cualquier dios secundario, para diferenciarse del Primero, tendría que tener alguna perfección que le faltaría al Primero. Así es que el verdadero Dios puede solamente ser uno. Este único Dios verdadero tomó naturaleza humana una vez y solamente una vez, en la divina persona de Nuestro Señor Jesucristo, quien probó su divinidad por una cantidad y calidad de milagros que no se han visto en la vida de ningún otro hombre jamás, pero que han acompañado a su Iglesia desde entonces: La Iglesia Católica Romana. La pertenencia a esa Iglesia es por la Fe, y está abierta a todos los hombres. Si creen, ese es el inicio indispensable de su eterna salvación. Si se rehúsan a creer, van camino a la eterna condenación (Marcos XVI, 16).

Por lo tanto si por sus eventos pasados y futuros en Asís, los papas Juan Pablo II y Benedicto XVI han fomentado a las almas a pensar que el Catolicismo no es la primera y única manera para alcanzar una eternidad feliz, sino solamente una entre muchas otras (aún cuando sea la mejor) que promueven la “paz y unidad” de la humanidad en esta vida, se deduce que ambos Papas han hecho posible la atroz condenación de un sinfín de almas en la vida venidera. En lugar de tener parte alguna en dicha traición (por lo menos objetiva), el Arzobispo Lefebvre prefirió ser despreciado, rechazado, menospreciado, marginalizado, silenciado, “excomulgado,” etc.

Hay un precio que se debe pagar por adherirse a la Verdad. ¿Cuántos Católicos están listos para pagarlo?

Kyrie eleison.

Realidad Desenfrenada

Realidad Desenfrenada on septiembre 4, 2010

“Pero, su Excelencia, ¿cómo puede usted declarar (cf. CE 163) que Dios es la única verdadera solución para todos los problemas sociales de una gran ciudad moderna, como aquellos que le presentó a Ud. su amigo en su propia ciudad hace tres semanas? ¿Qué tiene que ver Dios con la política o los problemas sociales? ¡Siempre pensé que Él estaba únicamente interesado en cosas de religión y espiritualidad!

Ah, mi querido amigo, ¿quién es Dios? No solamente Él mismo creó el alma de cada uno de nosotros y la materia de la cual nuestros padres formaron nuestros cuerpos, sino también Él sigue creándolos a cada momento en que siguen y seguirán existiendo. Por lo tanto Él está aún más cercano a cada uno de nosotros, los seres humanos, que lo que nosotros mismos estamos. Por lo tanto la Iglesia enseña que cualquier ofensa en contra de nuestro vecino es en primer lugar y ante todo una ofensa contra Dios, porque Él está más profunda y cercanamente dentro de nosotros de lo que nosotros mismos estamos. Así es que quien quiera que ofenda a su vecino, ofende más profundamente a Dios, y quien nunca ofende a Dios no ofenderá a su vecino. Entonces si en la parroquia y escuela de la FSSPX (cf. CE 163) los feligreses y los niños aprenden a poner a Dios y a sus Diez Mandamientos primero, ¿no están aprendiendo entonces a solucionar para las grandes ciudades todos los problemas entre los vecinos, es decir los problemas sociales y políticos, desde sus raíces?

Recordemos estos problemas de la gran ciudad de mi amigo. En los suburbios de la periferia las personas de raza blanca viven en su mayoría más allá de sus medios económicos en mansiones falsamente lujosas. Quieren aparentar ser ricos, y sueñan con ser ricos. ¿No están acaso idolatrando al materialismo y a Mamón, es decir al dinero? ¿Por el contrario, qué se enseña en la parroquia? “No puedes adorar a Dios y a Mamón. Es uno o el otro” (Mateo VI, 24). En los suburbios internos la gente, en su mayoría de color, en general no da mantenimiento a sus viviendas, a la desesperanza de los urbanistas, sin duda. Pero ¿acaso no es una forma similar de materialismo el medir la buena vida o la bondad de las almas por cómo mantienen sus casas? La limpieza nos acerca a lo divino, como dice el dicho, pero ¿qué aprenden los feligreses? – “Buscad primero el Reino de Dios y su Justicia, y todo lo demás se os dará por añadidura” (Mateo VI, 33). En otras palabras, busquen primera la santidad y la limpieza se dará enseguida.

Finalmente en el centro de la ciudad su sangre vital, su industria, sigue desapareciendo. ¿Por qué? ¿Acaso no es el capitalismo por sí mismo el que, en búsqueda de mayores ganancias por la subordinación de la industria a las finanzas, ha subcontratado la industria Americana a los extranjeros? ¿Acaso no es el poner el dinero antes que los hombres lo que está causando el empeoramiento del desempleo, la huída de la población de los centros de la ciudad y la transferencia de todo el poder a los maestros del dinero que están usando ese poder para trasformar más y más rápido los alguna vez orgullosos Estados Unidos en una parte humillada de su estado policial global?

¿Cómo pudo suceder esto? Por los hombres de raza blanca que dieron la espalda a Dios, renunciando (como insinuó mi amigo) a la misión que les fue dada por Dios de llevar al mundo hacia Él, y por idolatrar en su lugar a Mamón como la realidad suprema. ¡Esperemos que por un largo tiempo la pequeña parroquia y escuela de la Fraternidad de San Pío X, en las afueras de la ciudad, hagan de la supremacía de Dios, Nuestro Señor Jesucristo, una realidad desenfrenada!

Kyrie eleison.

Restaurando la Paternidad

Restaurando la Paternidad on mayo 22, 2010

Es fácil culpar a los padres hoy en día por no saber cómo educar a sus hijos. Será más útil ayudar a todos aquellos que desean recibir ayuda para ver en de dónde proviene ese problema que tienen con sus hijos. El problema es, en cierta forma, tan majestuoso como Dios, porque se deriva del rechazo y negación generalizado del mundo moderno hacia Dios.

La familia humana (por lo menos según el diseño de Dios) es una pequeña sociedad, que consiste básicamente de padre, madre e hijos. Pues bien, el sentido común nos dice que cada sociedad humana necesita una cabeza para poder funcionar. Si no hay una cabeza que dirija o mande, la sociedad pierde su dirección, y se desquebraja. Un equipo de fútbol necesita un capitán, un corporativo necesita un presidente, un país necesita un rey o un presidente de la nación, un pueblo necesita un alcalde, un cuerpo de bomberos necesita un jefe, un ejército necesita un general, una universidad necesita un rector, un tribunal necesita un juez, y así sucesivamente.

Ante todo, una familia necesita a un padre, porque la familia humana no es únicamente una sociedad humana, es la más básica y natural de todas las sociedades humanas, de hecho es el modelo básico de todas las demás sociedades. Esto es debido a que en ninguna otra sociedad pueden los lazos que unen a sus miembros ser tan arraigados o naturales como los lazos que atan al esposo a su esposa y a los padres a sus hijos. También es cierto que en ninguna otra sociedad se puede apreciar tan claramente como la cabeza, además de dirigir a sus miembros, debe de cuidar de ellos. Si un padre dirige sin cariño, la familia sufre de su dureza. Si cuida sin dirigir – lo que se ve más a menudo hoy en día – la familia sufre de su debilidad. Por lo tanto, la paternidad familiar es el modelo para toda autoridad humana. Es la razón por la cual (como se vio en el CE 145), el Cuarto Mandamiento que obliga a honrar a padre y madre se establece a la cabeza de los siete Mandamientos que gobiernan las relaciones en la sociedad humana.

Ahora bien, la paternidad familiar, como toda paternidad o autoridad, se deriva de Dios Padre. San Pablo dice “doblo mis rodillas al Padre de nuestro Señor Jesucristo, de quien toma nombre toda paternidad” (Efe. III, 14, 15). En otras palabras, dice la Palabra de Dios, de la paternidad de Dios Padre es que toda la paternidad en la familia humana y toda cabeza en la sociedad humana deriva su naturaleza, porque el “nombre” o palabra significa la naturaleza de la cosa. Por lo tanto es evidente que en cualquier mundo de donde Dios Padre es arrojado, como en la actualidad nuestro mundo lo hace, el nombre y la naturaleza de la paternidad serán sacados de nuestras mentes, y toda paternidad y autoridad serán despreciadas en nuestras vidas.

Padres de familia, ¡dirijan a sus familias hacia Dios! Pónganse ustedes mismos debajo de Dios, y sus esposas e hijos se pondrán más fácilmente por voluntad propia debajo de ustedes. “La cabeza de cada hombre es Cristo; la cabeza de la mujer es el hombre; la cabeza de Cristo es Dios,” dice San Pablo (I Cor. XI,3). Denle a su esposa y a sus hijos el ejemplo de poner varonilmente a Dios por encima, con una piedad tan natural como sobrenatural, y lo que sea que sobrevenga de nuestro mundo demente, por lo menos ustedes estarán haciendo lo mejor que puedan por la familia que Dios les ha encomendado.

Cuestiones más específicas para los niños se presentarán, si Dios quiere, en otro “Comentarios Eleison.”

Kyrie eleison.