Benedicto XVI

Mas Alegre

Mas Alegre on enero 28, 2012

Su Excelencia, ¡Por favor díganos algo más alegre!

Dios existe. El es todopoderoso, omnisciente, perfectamente justo, aunque su misericordia tambien es sin límite. El controla perfectamente todo lo que sucede en el mundo. Ni el Diablo ni sus servidores humanos, incluyendo a los criminales que hoy en día conducen el mundo, pueden levantar el dedo meñique sin su permiso. El conoce cada detalle de sus planes diabólicos y El utiliza a cada uno de ellos para cumplir con su propio designio Providencial.

Pero ¿Cómo puede entonces El permitir tanto mal en nuestro mundo?

Porque si bien El nunca quiere el mal, El quiere permitirlo de manera que un bien mayor se saque de ese mal. Numerosas profecías indican que de la corrupción global de hoy día, saldrá mañana el triunfo mas grande jamás alcanzado por la Iglesia Católica, como lo ha dicho Nuestra Señora de Fátima: “Al final mi Corazón Inmaculado triunfará.” Lo que está sucediendo en este momento preciso es que Nuestro Señor está utilizando a sus enemigos para purificar su Iglesia.

Pero ¿No podía haber encontrado una manera menos desagradable de purificar su Iglesia que la de hacernos atravesar por la increíble corrupción de hoy día?

Si ello dependiera únicamente de El, sin ninguna duda hubiera podido encontrar otras maneras de purificar su Iglesia, pero si usted y yo supiéramos todo lo que El sabe – pensamiento tonto – y si, sobre todo, usted y yo quisiéramos, como El lo hace, respetar la libre elección que El da a todos los seres humanos, entonces es muy verosímil que usted y yo viéramos que la manera que El elige de hacer las cosas es la mejor.

Y, por favor ¿que tiene que ver la libre elección del hombre con esta cuestión?

Dios no quiere robots o simplemente animales irracionales para compartir con El su beatitud. Ahora bien, aún El no puede dar a sus criaturas una felicidad merecida que ellas no hubieran hecho nada por merecer, puesto que eso es contradictorio y si bien tiene poder sobre todo lo que es, sin embargo no tiene poder sobre lo que no es, como es el caso de las cosas contradictorias. Pero si sus criaturas deben, al menos en parte, merecer su felicidad, entonces El debe darles libre elección, la cual si es verdaderamente real, debe ser capaz de elegir lo opuesto de lo que Dios quiere para esa criatura, y si ella es realmente capaz de elegir el mal, entonces eso es lo que sucederá, más o menos a menudo.

Pero usted dice que la verdadera Iglesia sigue a Nuestro Señor cuando ella enseña hasta que punto el camino que lleva al Cielo es estrecho y pocos los que lo encuentran (Mt.VII,14). ¿Cómo puede valer la pena para Dios el haber creado, hoy día mismo por ejemplo, una masa de seres humanos si solamente un número relativamente reducido alcanza el Cielo?¿Cómo es posible que un número tan grande cayendo en los horrores del Infierno no sea un precio demasiado elevado que paga Dios por el pequeño número de los que llegan al Cielo?

Porque Dios obra según la calidad, y no según la cantidad. Que sólo diez hombres justos hubieran podido salvar a toda la ciudad de Sodoma (Gen.XVIII,32) prueba cuán preciada es a Dios una sola alma que responde a su amor, mucho mas que un gran número que por su propia libre elección rechazan su amor. “Yo hubiera sufrido toda la Pasión solo por ti” dijo una vez Nuestro Señor a un alma. El diría lo mismo a toda alma.

¿Quiere usted decir que si, aún cuando el mundo me hace sufrir y me atormenta, simplemente me adhiero tanto mas estrechamente a Dios, entonces El tiene eso en cuenta a mi favor y para los que me rodean? ¡Yo casi quisiera que el mundo fuera aún peor!

¡Ahora usted comienza a comprender!

Kyrie eleison.

Explosion Proxima

Explosion Proxima on enero 7, 2012

Si algunos lectores han encontrado el “Comentario Eleison” de la semana pasada un poco sombrío para el principio del año, de veras me disculpo por ello, y prometo que el de esta semana terminará con una cita más esperanzadora. Pero en verdad, mucha gente, según me lo dicen, está todavía tranquilamente ignorante de cuan grave es la inminente catástrofe económica mundial. Peor, no se da cuenta de la gravedad pre-apocalíptica de la crisis en la Iglesia. Veamos por un momento este último punto.

La visión aún de algunos sacerdotes dentro de la Fraternidad SPX es que la Fraternidad SPX es una Congregación religiosa normal mientras que la Roma de hoy no es excesivamente anormal. Es cierto que Monseñor Lefebvre tuvo palabras muy duras sobre el Vaticano II y los “anticristos” dentro del Vaticano, pero en el transcurso de los 20 años que han pasado desde su muerte, las cosas han cambiado para bien. Ahora tenemos un Papa, piensan ellos, que es un Tradicionalista de corazón, como lo prueban su desbloqueo de la Misa Tridentina y su “levantamiento” de la pretendida excomunión de 1988 a los cuatro obispos de la Fraternidad. Así, con un poco de flexibilidad de cada lado, seguramente Roma y la Fraternidad SPX pueden alcanzar un cierto arreglo por el cual Roma devuelve a la Fraternidad SPX esa respectabilidad de la cual nunca hubiera tenido que ser privada, y la Fraternidad SPX puede reingresar a Roma en una procesión triunfal. Así las dos reunidas reconquistaran el mundo para Cristo. Puede ser que las Discusiones Doctrinales de 2009–2011 evidenciaron una total divergencia doctrinal, pero esto prueba simplemente que el arreglo tiene que ser puramente práctico (!).

Ay de nosotros! Los sacerdotes que se dejan mecer por tal sueño, o bien no han leído Pascendi o no entendieron lo que han leído. En su gran Carta Encíclica de 1907 San Pío X dio la voz de alarma sobre el hecho de que el Modernismo representa la mayor amenaza a la existencia de la Iglesia, porque el Modernismo es donde termina la ruta que separa el alma de la realidad natural o sobrenatural. Es el último autoaislamiento del espíritu en el interior de su mundo de ensueños sin Dios. El error no puede ir mas lejos. He aquí un ejemplo de este aislamiento:

Hacia el fin de la sección sobre el teólogo Modernista, Pascendi explica como el Modernista se regocija de ser condenado por la autoridad de la Iglesia. Así como una manguera de jardín no debe estar separada de la canilla que le permite regar, así la Iglesia no debe estar cortada de su fuente en la Tradición. La Iglesia necesita entonces progresar por un juego de intercambio entre el Modernismo y la Tradición. Por consiguiente necesita que la autoridad sea Tradicional y que ella ejerza su papel Tradicional condenándolos como Modernistas. De tal manera que si el Papa no los condena, ellos seguirán adelante, y si de hecho los condena también seguirán adelante porque precisamente al condenarlos, el Papa está contribuyendo al progreso de la Iglesia! Cara él pierde, seca ellos ganan. Es el error que se encierra en si mismo. Dios no puede ganar.

Pues bien, el gran y buen Dios tiene una sorpresa en reserva para los que así piensan. Para salvar las almas El inundó todo el sistema corrompido de los hombres en el tiempo de Noé, y para salvar nuevamente las almas puede esta vez limpiarlo con una explosión. La explosión puede o no comenzar en 2012. ¿Y la cita esperanzadora? –

“Mas cuando estas cosas comiencen a ocurrir, erguíos y levantad la cabeza, porque vuestra redención se acerca” (Lc.XXI, 28). La hora es la más negra justo antes del alba.

Kyrie eleison.

Roma Insiste

Roma Insiste on diciembre 17, 2011

Casi al mismo tiempo que Monseñor Fellay dejaba saber que la FSSPX pedirá esclarecimientos sobre el Preámbulo Doctrinal, la reacción de Roma a las discusiones doctrinales que tuvieron lugar desde 2009 hasta la primavera de este año, uno de los cuatro teólogos que tomaron parte en estas discusiones, Monseñor Fernando Ocariz, publicó un estudio “Acerca de la adhesión al Concilio Vaticano II.” El momento que eligió muestra que todavía no hemos salido del túnel, al contrario! Pero veamos sus argumentos, que al menos son claros.

En su introducción declara que el Concilio “pastoral” fue sin embargo doctrinal. Lo pastoral se basa en la doctrina. Lo pastoral busca salvar las almas, lo que implica doctrina. Los documentos del Concilio contienen mucha doctrina. Bien! El Monseñor al menos no va a esquivar las acusaciones doctrinales presentadas contra el Concilio pretendiendo que no era doctrinal, como lo han hecho muchos defensores del Concilio.

Luego, acerca del Magisterio de la Iglesia en general, dice que el Concilio Vaticano II estaba compuesto de los obispos Católicos que tienen “el carisma de la verdad, la autoridad de Cristo y la luz del Espíritu Santo.” Negarlo, dice, es negar algo que pertenece a la esencia misma de la Iglesia. Pero, Monseñor, ¿que me dice del conjunto de los obispos Católicos que siguieron la herejía Ariana bajo el Papa Liberio? Excepcionalmente, aún la casi unanimidad de los obispos puede desviarse doctrinalmente. Si esto ha ocurrido una vez, puede ocurrir nuevamente. Ocurrió en el Concilio Vaticano II, como lo demuestran sus documentos.

Continúa declarando que las enseñanzas no dogmáticas y no definidas del Concilio requieren, sin embargo, por parte de los Católicos, su asentimiento, llamado “sumisión religiosa de la voluntad y del intelecto,” lo cual es “un acto de obediencia bien enraizado en la confianza en la asistencia divina dada al Magisterio.” Monseñor, tanto a los obispos Arianos como a los Conciliares, no existe duda de que Dios les ofreció toda la asistencia que ellos necesitaban, pero que la rehusaron, como está demostrado en el caso de Vaticano II por la oposición a la Tradición en sus documentos.

Finalmente Monseñor Ocariz supone aquello que debe probar cuando arguye que el Magisterio Católico es continuo y que el Concilio Vaticano II es el Magisterio, luego sus enseñanzas no pueden estar mas que en continuidad con el pasado. Y si aparecen como una ruptura con el pasado, entonces la actitud Católica ha de ser interpretarlos de tal manera que tal ruptura no exista, como lo hace por ejemplo la “hermenéutica de la continuidad” de Benedicto XVI. Pero Monseñor, estos argumentos pueden revertirse. De hecho hay una ruptura doctrinal, como resulta claro al examinar los documentos Conciliares en si mismos. (Por ejemplo, hay (Vaticano II) o no hay (Tradición), un derecho humano que permita propagar el error?). Por consiguiente, el Vaticano II no fue el verdadero Magisterio de la Iglesia y la actitud Católica es mostrar que existe realmente esta ruptura con la Tradición, como lo hizo el Arzobispo Lefebvre, y no pretender que tal ruptura no existe.

Las últimas palabras de Monseñor son para afirmar que sólo el Magisterio puede interpretar el Magisterio. Lo que nos hace volver justo al punto de partida.

Estimados lectores, Roma de ninguna manera ha salido del túnel. Que el Cielo nos ayude.

Kyrie eleison.

Orgullo Ancestral

Orgullo Ancestral on octubre 15, 2011

En el segundo volumen acerca de la vida de Jesús publicado hace varios meses, el Papa Benedicto XVI hizo comentarios que les permitió a los periodistas saltar a la conclusión de que los Judíos ya no deben de señalárseles como responsables de deicidio, esto es el asesinato de Dios. Peor aún, el 17 de Mayo el director ejecutivo del Secretariado de la Comisión Episcopal de Relaciones Ecuménicas e Inter-religiosas de los EUA dijo que uno no puede acusar a la gente Judía de deicidio en ningún momento de la historia sin dejar de estar en comunión con la Iglesia Católica. En oposición a lo que mucha gente hoy en día quiere pensar, es tiempo de recordar aunque sea brevemente, lo que la verdadera Iglesia siempre solía enseñar acerca de la asesinato judicial de Jesús.

En primer lugar, el asesinato de Jesús fue verdaderamente “deicidio,” el asesinato de Dios, porque Jesús era una de las tres Personas divinas que en adición a su naturaleza divina había tomado una naturaleza humana. ¿Qué se murió en la Cruz? Únicamente la naturaleza humana. Pero ¿a quién se le asesinó en la Cruz en su naturaleza humana? Ni más ni menos que a la segunda divina Persona, esto es, a Dios.

En segundo lugar, Jesús murió en la Cruz para salvarnos a todos nosotros, seres humanos pecadores, de nuestros pecados, y en este sentido todos los hombres fueron y siguen siendo el fin de su muerte. Pero únicamente los Judíos (líderes y pueblo) fueron los agentes primarios del deicidio, porque es obvio de los Evangelios que el Gentil más involucrado, Poncio Pilato, nunca hubiera condenado a Jesús a muerte si los líderes Judíos no hubieran levantado entre la gente el clamor para su crucifixión (Mateo XXVII, 20). Ciertamente los líderes doctos eran más culpables que el pueblo ignorante, dice Sto. Tomás de Aquino (Suma III, 47, 5), pero todos en unísono aclamaron para que su sangre cayera sobre de ellos y sobre de sus hijos (Mateo XXVII, 25).

En tercer lugar, al menos el Papa León XIII consideró que había una verdadera solidaridad entre los Judíos que clamaban en ese entonces para que Jesús fuese asesinado, y la colectividad de los Judíos de los tiempos modernos. ¿Acaso no en su Acto de Consagración del Genere Humano al Sagrado Corazón de Jesús hizó a la totalidad de la Iglesia, desde finales del siglo 19 y en adelante, rezar a Dios para que tornara sus “ojos de misericordia hacia los hijos de esa raza, alguna vez el pueblo elegido de Dios: desde tiempos remotos clamaron sobre de ellos la Sangre del Salvador; descienda ahora sobre ellos un bautismo (como un lavado) de redención y de vida”?

Pero León XVIII de ninguna manera está solo al observar dicha continuidad entre los Judíos a través de los siglos. ¿Acaso no reclaman ellos mismos hoy en día la tierra de Palestina basados en que es suya por el derecho otorgado por Dios en el Antiguo Testamento? ¿Ha habido en la faz de la tierra alguna raza-pueblo-nación tan orgullosamente auto-identificante a través de todos los tiempos? Originalmente elevados por Dios para acunar al Mesías, Dios mío, cuando él vino se rehusaron colectivamente a reconocerlo. Colectivamente también, con lo que se puede entender que siempre existen nobles excepciones, han permanecido fieles a ese rechazo, por lo que cambiaron su religión de la de Abraham y Moisés y del Viejo Testamento a aquella de Anás, Caifás y del Talmud. Trágicamente, su mismo entrenamiento divino para el Mesías los lleva a rechazar a aquel que les parece un falso mesías. Hasta que se conviertan al final del mundo, como la Iglesia siempre lo ha enseñado (cf. Rom. XI, 26–27), parecen estar obligados a elegir seguir actuando, colectivamente, como enemigos del verdadero Mesías.

¿Como es posible que Bendito XVI pierda verdades tan antiguas?

Kyrie eleison.

Regalos Griegos – III

Regalos Griegos – III on septiembre 3, 2011

Un periodista Italiano afirmó el mes pasado que él tenía la autoridad de “una persona de dentro del Vaticano” para escribir que en la reunión del 14 de Septiembre entre los oficiales de Roma y el Superior General de la Sociedad de San Pio X con sus dos Asistentes, se podría hablar acerca de una posible regularización canónica de la FSSPX. Aquí un resumen de los punto principales de Andrea Tornielli (ver http://​vaticaninsider.​lastampa.​it/​en/​homepage/​inquiries-and-interviews/​detail/​articolo/​lefebvriani-vaticano-tradizione-fellay-7423/​):—

Los oficiales del Vaticano presentarán a la FSSPX (1) una aclaración de la “hermenéutica de la continuidad” de Benedicto XVI para mostrar como es la interpretación más auténtica de los textos del Vaticano II. “Solo si,” dice Tornielli, esta aclaración supera las dificultades doctrinales entonces se les presentará (2) una solución a la irregularidad canónica en donde aún se encuentran los obispos y sacerdotes de la FSSPX: un Ordinariato como el que les fue otorgado a los Anglicanos en Mayo, por medio del cual la FSSPX dependería directamente de la Santa Sede a través de la Comisión Ecclesia Dei. Este acuerdo le otorgaría a la FSSPX la capacidad de “retener sus características sin tener que dar cuentas a los obispos diocesanos.” Pero (3) dicho acuerdo no se da por cierto ya que “dentro de la FSSPX coexisten diferentes sensibilidades.”

De lo que sabemos públicamente acerca de las relaciones Vaticano-FSSPX, el pronóstico de Tornielli para la reunión del 14 de Septiembre es probable; pero cada uno de sus tres puntos principales merece ser comentado:—

Primeramente, en relación al abismo doctrinal entre el Vaticano de hoy en día y la FSSPX de Monseñor Lefebvre, no se puede decir que la “hermenéutica de la continuidad” de Benedicto XVI es una solución (ver CE 208–211). Si Tornielli está en lo cierto, será interesante (aunque no edificante) ver cómo Roma intenta nuevamente probar que 2 + 2 puede ser 4 ó 5, 5 ó 4. La doctrina Católica es tan rígida, acaso no siempre tan clara para los humanos, como 2 + 2 = 4.

En segundo lugar, con respecto al acuerdo canónico suscitado por Tornielli, si – inimaginablemente – la FSSPX aceptase cualquier tipo de compromiso doctrinal, de ninguna manera podría entonces situarse debajo de la Santa Sede (2 + 2 = 4 ó 5) y aún “retener sus características” (basadas en que 2 + 2 = exclusivamente 4). El acuerdo práctico ejercería una presión constante y finalmente irresistible de hacer que la doctrina Católica no excluya mássino incluya el error, lo que sería igual a adoptar la ideología Francmasona y a abandonar la razón principal de existencia de la FSSPX del Arzobispo Lefebvre.

Y en tercer lugar, Tornielli puede bien estar en lo cierto al decir que un acuerdo no es seguro, pero él y su “informante del Vaticano” están absolutamente equivocados si piensan que el problema es que existen “diferentes sensibilidades.” Las sensibilidades son subjetivas. El problema central entre el Vaticano y la FSSPX de Monseñor Lefevbre es tan objetivo como 2 + 2 = 4. En ningún momento en la historia, ya sea mirando hacia atrás o hacia adelante en la eternidad, en ningún planeta o estrella creada o por ser creada, podría 2 + 2 ser algo diferente que cuatro, exclusivamente.

¿Acaso no es esa la razón por la cual, cuando todos los esfuerzos tácticos de Mons. Lefebvre habían fracasado en las negociaciones de Mayo de 1988 para obtener del Cardenal Ratzinger un lugar seguro para la Fe dentro de la corriente oficial de la Iglesia, él dijo sus famosas palabras? – “Su Eminencia, aún cuando usted nos diera todo lo que queremos, aún así tendríamos que rechazarlo porque nosotros estamos trabajando para cristianizar la sociedad, mientras que ustedes están trabajando para des-cristianizarla. La colaboración entre nosotros no es posible.”

Kyrie eleison.

Fe Victoriosa

Fe Victoriosa on agosto 6, 2011

Como respuesta a la crítica persuasiva de Monseñor Tissier de Mallerais acerca del pensamiento del Papa Benedicto, expuesta brevemente en las últimas cuatro ediciones de estos “Comentarios” ¿qué es entonces lo que debemos decir (Rom.VI,1)? Veamos tres argumentos que buenos Católicos pueden utilizar para defender al Papa en contra de la acusación que su pensamiento no es Católico.

Una primera línea de defensa podría sostener en general que el atacar en cualquier forma al Papa es ayudar a los enemigos de la Iglesia. ¿Pero acaso no es el deber principal del Papa “confirmar a sus hermanos en la Fe” (Lucas XXII, 32)? Entonces si el pensamiento del Papa se desvía gravemente de la Fe, el señalarle, con todo respeto, aquello en lo que se está equivocando, no significa en lo más mínimo atacarlo ni hacer el trabajo de los enemigos de la Iglesia, sino ayudarlo para que vea claro el cómo cumplir con su obligación y recordarle del único medio que tiene para conquistar a esos enemigos, hoy en día más poderosos que nunca – “Esta es la victoria que ha vencido al mundo – nuestra Fe” ( I Juan V,4).

Una segunda objeción a los argumentos de Mons. Tissier, particular a nuestro propio tiempo, podría ser que el Papa Benedicto es un prisionero en el Vaticano, por lo que no es libre de defender la Tradición Católica como realmente desearía hacerlo. Ahora bien, es cierto que los Papas post-Conciliares han sido rodeados de altos dirigentes de la Iglesia que son Francmasones que secretamente buscan destruir la Iglesia. También es posible que desde el Vaticano II los financieros hayan colocado con siempre más fuerza un nudo corredizo sobre el cuello del Vaticano. Pero suficientes dólares seguirían a la verdadera doctrina, si tan solo esta fuese proclamada; y si la Fe de Benedicto no estuviese aprisionada por sus errores Hegelianos, fácilmente tendría la victoria por sobre los Francmasones que lo rodean. ¿La victoria a través del martirio? Tal vez haría falta una serie de Papas mártires para liberar a la Iglesia como en sus primeros tiempos. Mas si tan solo los mereciéramos, ¡el Vaticano pronto sería de nuevo libre!

A una tercera objeción, más directa, nos referimos en el último “CE”: Benedicto XVI puede decir que no solamente él cree en la corrección y el enriquecimiento mutuo de la Fe y de la Razón, sino también en la Fe Tradicional. Por lo tanto, él podría decir que cree absolutamente en que el cuerpo crucificado de Jesús resucitó con su alma humana de su tumba la mañana de Pascua, de tal manera que si él también le dice al hombre moderno que el verdadero significado de la Resurrección no es un cuerpo material que sale de su tumba material, sino el amor espiritual conquistando a la muerte, eso es únicamente para hacer la Resurrección accesible al incrédulo hombre moderno.

Pero, Santo Padre, ¿se levantó vivo o no, ese cuerpo crucificado de esa tumba material? Si no se levantó, deje de creer que si lo hizo, deje aún de aparentar que cree que si lo hizo y renuncie a ser el Papa de los creyentes alucinantes. Pero si de hecho, sí se levantó de la tumba; entonces ESO es lo que Ud. debe de proclamar al pobre hombre moderno y debe de – disculpe mi lenguaje – echarle en cara su incredulidad y restregárselo hasta que reaccione. El hombre moderno no necesita que se le hable acerca del amor, amor, amor. ¡Eso lo escucha todo el santo día! Lo que necesita escuchar es que únicamente Nuestro Señor verdaderamente resucitado ha podido dar jaque mate a sus enemigos implacables y convertir a sus Apóstoles totalmente desesperanzados en conquistadores del mundo.

Santo Padre, no sirve hablar al mundo de hoy conforme a su pensamiento podrido. ¡Hay que conquistarlo con el pensamiento de Nuestro Señor! Y si Ud. está obligado a darnos un ejemplo de martirio, crea que es el ejemplo que muchos de nosotros podremos necesitar en un futuro no muy lejano. Humildemente oramos por usted.

Kyrie eleison.